Cuatro escenas religiosas iluminadas rodearán el gran árbol de Navidad de la Puerta del Sol

La Anunciación, la Virgen y San José buscando posada, la Natividad y la Adoración de los Reyes Magos cercarán el gran abeto artificial de gran vistosidad que se estrenó la pasada Navidad en la Puerta del Sol. Lo harán desde unos paneles fabricados con plásticos reciclados, un material que reduce la contaminación lumínica y ahorra energía.

Aunque este año la batalla de la propaganda parece estar centrada en el tamaño de los árboles navideños –los alcaldes de Vigo y Badalona compiten por quién tiene el más alto–, en Madrid José Luis Martínez-Almeida ha optado por darle más intención cristiana a la decoración navideña de este punto de la ciudad.

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Los cuatro paneles tienen, cada uno, 2,4 metros de altura por 4,9 de ancho, y se colocarán coincidiendo con los puntos cardinales: cerrando la base del árbol de Navidad por el norte, el sur, el este y el oeste. En ellos, 22.320 puntos led, con una potencia de 2.620 watios –equivalente a un secador de pelo– iluminarán las escenas en que la Virgen recibe la visita del Arcángel Gabriel y le anuncia su embarazo, ella y San José se dirigen a Belén en busca de posada, el nacimiento de Jesús y la llegada de los Reyes Magos de Oriente, que adoran al Niño.

La fabricación de los paneles ha corrido a cargo de Ximénez, la empresa adjudicataria del alumbrado navideño. Según los estudios de su departamento técnico y de innovación, el material con el que se han hecho, el EcoGreenLux, es capaz de concentrar la luz en el interior del producto y evitar la expansión de esta hacia la atmósfera. Con ello se reduce la contaminación lumínica en un 93 por ciento, explican fuentes municipales.

Para esta próxima Navidad, el área de Obras y Equipamientos del Ayuntamiento de Madrid, dirigida por Paloma García Romero, va a incorporar más de una decena de novedades a la iluminación de las calles. Estas vidrieras en torno al gran árbol de Sol son una de ellas, pero no la única: la Gran Vía lucirá unas cadenetas vegetales con motivos como flores de Pascua, lirios, belladonas, acebo o muérdago. Habrá más de 230 emplazamientos repartidos por los 21 distritos con luces especiales con motivo de las fiestas navideñas.

Para los responsables municipales, la instalación de casi 12 millones de bombillas que se van a instalar –todas de tipo led–, que va a suponer una inversión de 4,3 millones de euros este año, no son un gasto, sino una inversión, porque «suponen un importante impulso para el comercio, la hostelería, la restauración y el turismo de la ciudad», repiten como un mantra cuando surge este asunto. La factura de la luz de este alumbrado especial –en torno a los 1.150 euros al día, según datos del propio ayuntamiento– lo asume la empresa adjudicataria.

Habrá en las calles de Madrid 6.600 cadenetas luminosas, 115 cerezos y once grandes abetos iluminados, belenes figurativos en las puertas históricas de la ciudad, como las de Alcalá, Toledo o San Vicente, y en las entradas de la Plaza Mayor.

En el paseo del Prado va a instalarse una gran menina luminosa, en la plaza de Colón habrá un nacimiento gigante, y la enorme bola luminosa y musical que en otras ocasiones se ubicaba en la confluencia de las calles de Alcalá y Gran Vía, estará este año en la plaza de España, junto a los Jardines de Sabatini.

Más de 50 operarios trabajan durante tres meses (desde mediados de agosto a mediados de noviembre) para montar las luces por la ciudad. Utilizan para ello 140 camiones de transporte pesado de material y 25 grúas ligeras.