Los radicales salen de la Puerta del Sol para evitar el férreo control de la Policía

La estrategia implementada por la Policía Nacional , con todas las salidas taponadas, logró aislar a los vándalos en pequeños grupos y evitar así que pudieran extender en masa los altercados. Con todo, las barricadas, incendios y destrozos en comercios y mobiliario urbano afectaron a vías aledañas como las calles del Correo, Mayor y Arenal.

A esta primera discrepancia se suma también el hecho de que el entorno de la Puerta del Sol es un enclave plagado de cámaras de videovigilancia , lo que podría facilitar los trabajos de identificación de algunos de los alborotadores y, por ende, su posterior detención. Por ello, no es de extrañar que de todas las concentraciones anunciadas para este sábado por el citado colectivo en una quincena de localidades españolas, Madrid fue la única en la que no se desveló el lugar hasta bien entrada la tarde.

« Es el momento, o ellos o nosotros, o libertad o represión, o lucha o humillación. O nos organizamos con uñas y dientes, aquí y ahora, o nos volverán a pasar por encima», reza el comunicado de los manifestantes. El peor de los escenarios podría darse en caso de que los vándalos consigan cortar la Gran Vía, con la posibilidad añadida de arrojar mobiliario urbano a agentes y comercios. La brutalidad mostrada por la turba fue tal que 32 policías resultaron heridos , de los cuales tres de ellos precisaron de traslado hospitalario.

En una de las embestidas, se observa a un manifestante golpear con un patinete eléctrico a un antidisturbios caído. Los integrantes de la Unidad de Intervención de la Policía Nacional (UIP) llevaron a cabo una especie de pinza, a través de sucesivas cargas que permitieron adelantar la línea de forma progresiva. De esta forma, los agentes fueron atrapando a los radicales superados, obligándoles a salir por la vías controladas.

El delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco , confirmó este viernes que la Policía está preparada, aunque no con un dispositivo especial. Esta misma tarde, se trasladará al Centro de Coordinación de la Jefatura Superior de la Policía de Madrid para supervisar el operativo dispuesto en base al desarrollo de los acontecimientos. Así, lo único seguro es la voluntad de los concentrados de no frenar una escalada delictiva que amenaza ahora con poner en jaque la emblemática plaza del Callao.