Frente vecinal contra la nueva ordenanza de Terrazas de Madrid: «Nos han ignorado»

Las asociaciones de vecinos han formado frente común contra la norma, desarrollada por el Área de Coordinación Territorial e impulsada por Vicealcadía. Begoña Villacís insistió, desde que dio a conocer que la modificaría, que trabajaría con todos los agentes sociales y empresarios implicados para llevarla a cabo mediante el consenso ; ellos aseguran que no es así y que «causará muchos más problemas que soluciones».

«En vez de dar soluciones con medidas acordadas, va a enrocar más los ánimos. Es un error de base no haber querido hablar con nosotros, por mucho que lo repitió», explica a ABC Víctor Rey, portavoz de la asociación Sol y barrio de las Letras. El representante sostiene que si ellos y los hosteleros se hubiesen sentado habrían logrado una «normativa mucho mejor» que la que se aprobó ayer en Cibeles.

Nombran, como ejemplos, que la ordenanza «se ha hecho p or y para parte de la hostelería », aquella que tiene terrazas, y aseguran desconocer cuáles son las zonas que se declararán saturadas y bajo qué criterios. «Es el misterio de la Santísima Trinidad», ironiza Rey: «Será la administración la que a su libre albedrío diga qué zona es tensionada o no ». Las asociaciones se plantean ya acudir a los tribunales contra una ordenanza que «no restituye» sus derechos.

En este sentido, el ayuntamiento indica que estas áreas serán aquellas en las que haya ocupación superior al 33 o 40% según el ancho de la acera , elevado tránsito peatonal y afecciones medioambientales. «¿Cómo se va a medir eso?», se pregunta Saturnino Vera, de la Cava Baja-La Latina. «Se ha hecho lo que han querido los hosteleros, y así las terrazas se quedan asentadas para siempre», sentencia.

Los vecinos se sienten defraudados , puesto que el consistorio sostuvo que las terrazas Covid eran un mecanismo temporal para paliar los efectos negativos que las restricciones de pandemia ha tenido en el sector. «Eran ilegales, iban contra la ordenanza, y ahora les hacen una ordenanza a medida para mantenerlas en contra de lo que pide el vecindario», añade Vera: «No han oído las voces de los vecinos».

«Nos sentimos engañados. Nos han mentido e ignorado», dice más tajante Pilar Rodríguez, del Organillo de Chamberí, vecina de Ponzano, una de las calles más afectadas por los veladores en plazas de aparcamiento. «Les han ampliado el negocio», dice. «Una ordenanza así no se puede hacer en tres meses. La ciudadanía tiene derecho a decidir qué se hace en el espacio público , porque condiciona la vida de la ciudad», continúa. «No queremos que quiten las terrazas, lo que queremos es que se regulen y se vuelva, como prometieron, al escenario anterior», explica.

Coincide con ella José Luis Rodríguez, portavoz de Goya-Dalí y de la plataforma de vecinos del distrito de Salamanca. «Estamos en contra de que se utilice para terrazas la zona de coches y acera , la ocupación que hacen del espacio público. Creemos que ha cedido a los ‘lobby’ de la hostelería», dice.

La norma fue aprobada con los votos de PP, Cs y el Grupo Mixto de los carmenistas, pero logró unir a Vox con PSOE y Más Madrid para votar en contra. «No voy a pedir perdón por salvar 6.000 puestos de trabajo», expresó Villacís, en referencia a los empleos que no se han perdido gracias a este tipo de instalaciones: «Vecinos son todos. He dedicado esfuerzos para que el descanso sea innegociable». El informe independiente de impacto económico, obligatorio en todas las nuevas ordenanzas, sostiene, no obstante, que la normativa «mantendrá o creará entre 68 y 85 puestos de trabajo totales». Los hosteleros sí que aplauden que las terrazas continúen en las bandas y no descartan que se mantengan en 2024, formando así lo que parece ser una nueva barrera insalvable entre empresarios y moradores.