Israel carga contra el Gobierno por «dar alas a Hamás» y le acusa de alentar el «antisemitismo»
El escrito llega tras la carta del ministro de Consumo, Pablo Bustinduy, a las empresas españolas en la que les pedía no contribuir al genocidio en Palestina
Exteriores y Economía se desmarcan de la carta de Bustinduy a las empresas españolas en Israel
Rodica Radian-Gordon, la embajadora de Israel en España
La Embajada de Israel en España ha emitido un comunicado en el que acusa a «algunos ministros, intelectuales y medios de comunicación» de «dar alas a Hamás» y de recurrir a acusaciones que son «una clara incitación al odio y alientan el antisemitismo». ... La denuncia contra miembros del Gobierno español llega horas después de que el ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, enviara una carta a las empresas españolas en el país instándoles a no contribuir en lo que, según ha confirmado más tarde en Barcelona, es un «genocidio en Palestina».
La legación manifiesta en el texto su «total rechazo a la falsa acusación [...] de que Israel está cometiendo un genocidio» y afirma que la demonización y deslegitimación del Estado israelí juega a favor de quienes persiguen su desaparición. Entre estos últimos cita al grupo terrorista Hamás, con el que mantiene una guerra abierta desde los ataques del pasado 7 de octubre.
Si bien el comunicado, en el que se habla de «acusaciones carentes de fundamento» no cita directamente a Bustinduy, éste si hizo esta mañana referencia en su carta a las operaciones militares del Ejército de Israel (IDF) en la Franja de Gaza. El responsable de la cartera de Consumo ha pedido que las empresas nacionales con actividad económica en Israel —hay 28 empresas de las que dependen 32 filiales— tomen las medidas necesarias para evitar contribuir a las «flagrantes vulneraciones de derechos humanos que el Estado israelí esta cometiendo en los Territorios Palestinos Ocupados».
Unas declaraciones que no han sido las únicas en esta línea de miembros del Ejecutivo. La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha afirmado hoy que «lo que está sucediendo con el genocidio de Israel contra el pueblo palestino conmueve». Y ha insistido, al ser repreguntada durante una entrevista en Apunt: «Obviamente lo está cometiendo».
Tanto Rego como Bustinduy son miembros de Sumar, partido minoritario en el Gobierno de coalición que ha mantenido una posición dura contra la respuesta de Israel después de los ataques de Hamás. Figuras importantes como Íñigo Errejón, portavoz en el Congreso, o incluso la líder Yolanda Díaz han acudido a manifestaciones de apoyo al pueblo palestino.
Díaz ya pidió en el mes de octubre que Israel depurara sus responsabilidades por «crímenes de guerra» ante la Corte Penal Internacional (CPI). Ione Belarra, secretaria general de Podemos, entonces en el Gobierno, fue un paso más allá y reclamó llevar al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ante la CPI. Una postura que no han abandonado.
En esas fechas, la Embajada de Israel acusó a miembros del anterior Gobierno, pues todavía no se había celebrado la investidura de Pedro Sánchez tras las elecciones del 23J, de «alinearse con el terrorismo». Una acusación que el Ministerio de Asuntos Exteriores tachó de «insinuaciones infundadas».
Desde entonces, las relaciones diplomáticas con Israel, que este martes viven una nueva crisis, han sido complejas. En parte, condicionadas por el impulso que ha tratado de dar Pedro Sánchez al reconocimiento del pueblo palestino. Una misión que le ha llevado a reunirse con los dirigentes de distintos países europeos, pero que no ha llegado a concretarse en un apoyo amplio.
Relaciones complejas
De hecho, no es la primera vez que portavoces israelíes afirman que las declaraciones de miembros del Gobierno español podrían estar beneficiando a Hamás. Un mes después de el choque a causa de las palabras de Belarra, en noviembre de 2023, Sánchez inició un viaje oficial en Israel que terminó con un mitin en el paso de Rafah, donde hoy Israel centra su ofensiva. Durante este, en una reunión con el presidente del país, Isaac Herzog, le trasladó que la respuesta israelí no podía «implicar la muerte de civiles inocentes». Unas declaraciones que, según denunció un portavoz de las IDF ante este periódico, «hacen el juego a Hamás».
Más recientemente, antes de la última polémica, Sánchez comentó hace dos días en su página oficial de X los últimos acontecimientos de la guerra en Gaza: «Una ofensiva sobre Rafah aumentará el sufrimiento que ya padece el pueblo palestino». A lo que añadió que «es urgente que se alcance un alto el fuego que evite la muerte de más civiles inocentes y permita la entrada de ayuda humanitaria y la liberación de los rehenes israelíes».
Justo sobre esto último, la liberación de los rehenes que mantiene secuestrados Hamás, también reflexionaba el comunicado enviado este martes por la Embajada israelí. Esta planteaba el contraste entre las acusaciones que reciben «con el incomprensible silencio en España de la mayoría de los intelectuales y las organizaciones de derechos humanos ante el drama de los 132 secuestrados que siguen en manos de los terroristas de Hamás«.
Ver comentarios