El inspector de Transportes en tiempos de Ábalos declara que Koldo García tenía «mucha actividad» en el ministerio

El instructor Ismael Moreno interrogó como testigo a Sánchez Fuentefría en la causa donde investiga a Koldo García por presuntos delitos de organización criminal, tráfico de influencias, blanqueo y cohecho por su intervención en la adjudicación de contratos para el suministro de material sanitario a los ministerios de Transportes e Interior durante la pandemia a la compañía Soluciones de Gestión.

El testigo destacó la alta actividad de García en el Ministerio y su interés porque el material sanitario llegase a España, así como afirmó que él mismo llegó a guardar mascarillas en un almacén de Transportes, algo que valoró como extraño, según trasladan fuentes jurídicas presentes en la comparecencia.

Sánchez Fuentefría no pudo aportar mucha información sobre la gestión del material sanitario entre Transportes y Soluciones de Gestión porque, según declaró, él sólo se ocupaba de coordinar las necesidades del Ministerio de Transportes y no de asuntos de contratación.

Hasta el momento, en la tanda de declaraciones programada para esta semana, han comparecido también como testigos varios cargos de ADIF, entre los que destaca su expresidenta, Ana Pardo de Vera, al frente del organismo cuando compró 12,5 millones de euros en mascarillas a la empresa instrumental en cuestión.

Según fuentes presentes en su declaración, aseguró que era «habitual» encontrarse con el presunto comisionista de la trama, Víctor de Aldama, cuando iba despachar con el exministro José Luis Ábalos al Ministerio de Transportes. Si bien admitió no saber a qué se dedicaba.

Por su parte, quien fuera secretario general de Puertos del Estado, Álvaro Sánchez Manzanares, señaló a la cúpula del ministerio como el responsable de la compra de material sanitario a Soluciones de Gestión en su declaración en calidad de investigado.

Durante su etapa, Puertos del Estado adquirió a la empresa vinculada con la trama mascarillas profilácticas por un valor de 20 millones de euros. A partir de ahí, Adif (12,5 millones) , el Ministerio del Interior (3,4 millones) y las comunidades de Canarias (12 millones) y Baleares (3,7), compraron mascarillas a la misma sociedad, hasta superar los 53 millones de euros.

Mañana será el turno, también como imputado, de Michaux Miranda, exjefe de personal de ADIF. Su testimonio podría servir para esclarecer si fue una de las personas que ejerció «ciertas presiones» sobre los responsables de las administraciones que debían adjudicar los contratos de suministro de mascarillas, »sin permitir o dar pie a que pudieran examinarse otras ofertas» que no fuera la de la empresa vinculada a la presunta trama, Soluciones de Gestión, tal y como sostiene Fiscalía Anticorrupción.