galicia
Seis muertos tras caer un autobús al río Lérez en Pontevedra
el mal tiempo complicó el rescate
En el vehículo viajaba un grupo de personas que había visitado por Nochebuena a sus familiares presos en la cárcel de Monterroso
Uno de los viajeros pudo llamar el 112 desde el autobús cuando el agua empezó a inundarlo
El conductor, aturdido, no recuerda si en las última parada subieron «dos o tres personas»
Oscuridad, lluvia y fuertes corrientes: el dramático rescate del autobús que se precipitó al Lérez en Pontevedra
Un grave accidente de autobús empañó la Nochebuena en Galicia. Según las últimas actualizaciones a las que ha tenido acceso ABC, seis personas fallecieron tras la caída de un autobús al río Lérez (Pontevedra), a la altura del municipio de Cerdedo-Cotobade. Todos ... ellos han sido rescatados ya, por lo que el operativo de rescate se dio por concluido en torno a las 17.30 horas de este domingo. Entre los ocupantes del autocar se encontraba un grupo de personas que había visitado a sus familiares presos en la cárcel de Monterroso, y que regresaban a casa al filo de las 9.20 horas de la noche de este sábado. Todos viajaban en un autobús de la empresa Monbus de la línea regular entre Lugo y Vigo, que cayó al río a la altura del kilómetro 67,5 de la N-541, en la villa de Pedre. El accidente, informaron fuentes de emergencias, se produjo desde una altura de más de 70 metros.
Los Bomberos pudieron socorrer con vida al conductor del vehículo y una mujer durante los primeros momentos del operativo de rescate, que también permitió localizar dos cadáveres, uno de ellos atrapado dentro del vehículo. Fuentes oficiales confirmaron a este diario que el conductor se encuentra «aturdido» y no recuerda si en la última para «subieron dos o tres personas», por lo que durante varias horas se pensó que había un séptimo desaparecido. Sin embargo, y ante la falta de denuncia por parte de más familiares, las labores quedaron zanjadas aunque mañana se volverá a rastrear la zona.
Después de la localización de los dos primeros cuerpos, las labores de rescate se retomaron este domingo con el hallazgo de un tercer cuerpo a primera hora de la mañana. Fue el GEAS de Guardia Civil - Grupo Especial de Actividades Subacuáticas- quien dio con el cadáver. El cuarto fallecido apareció en los márgenes del río al filo de las 12 horas. Según pudo saber ABC, fue una patrulla de la Guardia Civil la que lo encontró mientras peinaban los márgenes del Lérez en busca de los desaparecidos. El quinto y el sexto fueron localizados en torno al mediodía por los efectivos de emergencias desplazados al lugar.
El operativo de búsqueda tuvo que cancelarse durante la noche por el mal tiempo, la escasa visibilidad y la imposibilidad de acceder al interior del vehículo, que se encuentra metido en el río. Las labores de rescate se reactivaron esta mañana, con la luz del día facilitando la búsqueda.
Fuertes corrientes y oscuridad
El rescate durante la noche fue complicadísimo. El autobús se precipitó desde una gran altura hasta caer en el Lérez, que corría con mucha fuerza debido a las intensas lluvias de los últimos días, que se cebaron de manera especial con esta provincia. La fuerza del agua y la oscuridad de la noche hacían imposible entrar en el autocar. El primer rescate fue el del conductor, gracias a una línea de vida (un dispositivo empleado por los bomberos, que permite la sujeción en lugares elevados). También en ese momento se pudo sacar del interior a una pasajera. Estas dos personas fueron evacuadas con rapidez hacia el Hospital Clínico Universitario de Santiago y al de Montecelo, en Pontevedra. Posteriormente se rescatarían los cuerpos de dos viajeros sin vida.
Pasaban menos de 20 minutos de las nueve de la noche de Nochebuena cuando se dio el primer aviso, informa Axega. Fue un ciudadano que vio la barrera del puente totalmente destrozada, por lo que aseguró que tenía que haber un vehículo precipitado. La noche y las condiciones adversas, no obstante, no le permitieron ver nada. Con estos datos, los gestores del Centro Integrado de Atención a las Emergencias de Galicia activaron los protocolos correspondientes para la movilización de los siguientes recursos: Bomberos del Deza, GES de A Estrada, Urgencias Sanitarias de Galicia-061, Protección Civil de la localidad, Guardia Civil de Tráfico, personal de mantenimiento del Ministerio de Fomento como titular de la vía y, en prealerta, los Bomberos de Pontevedra, que, poco después, se unieron al dispositivo, recoge el boletín de Axega.
Llamada desde el interior del autobús
La siguiente llamada que recibió el 112 Galicia fue desde dentro del propio vehículo. Uno de los ocupantes informaba que el autocar se había salido de la carretera y caído al río, y comenzaba a entrar agua. En ese momento se conocían más datos sobre el siniestro: se trataba de un autobús de Monbús que realizaba el trayecto Lugo-Vigo y que llevaba ocho o nueve viajeros. Sobre las causas del accidente, que aún no han sido despejadas, el alcalde de la localidad, Jorge Cubela, indicó en declaraciones a los medios que el punto en el que se produjo el siniestro es una recta sin aparente complicación, pero destacó las malas condiciones que la vía presentaba anoche y los embolsamientos de agua. «Es un suceso dantesco» indicó el regidor. Por su parte, fuentes de la Guardia Civil informaron de que el conductor del autocar dio negativo en las pruebas de alcohol y droga.
El presidente del Gobierno gallego, Alfonso Rueda, se desplazó al lugar junto a otros integrantes del Ejecutivo. Desde el epicentro del accidente, indicó que «es tremendo siempre tener que hablar de un accidente así, pero en estas fechas es mucho más dantesco. Vamos a seguir trabajando y cuanto antes recuperar los cadáveres y que se recuperen cuanto antes los heridos».
Cuestionado sobre la posible retirada del autobús con dos grúas, Rueda explicó que primero se comprobará «si es seguro» ya que estas grúas son «de gran tonelaje», por lo que «hay que ver si es seguro y si el puente aguanta el tonelaje de las grúas y del autobús». Un grupo de psicólogos expertos en catástrofes también fueron movilizados para prestar atención a los familiares de las víctimas del accidente.
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