Juicio del alvia
Las comisiones mixtas de seguridad de Renfe y Adif fueron "suprimidas" por Cortabitarte
El presidente del Comité de Empresa de Renfe aseguró que la Agencia Ferroviaria Europea se «sorprendió» de que el tren pudiera «pasar a 200 por una curva de 80»
SANTIAGO
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónHasta 2008, Renfe y Adif compartían una comisión de seguridad mixta. Pero, en 2007, el por aquel entonces director de seguridad de la empresa administradora, Andrés Cortabitarte —uno de los imputados por el accidente de Angrois—, «puso de manifiesto» que un decreto de 2007 «justificaba ... la eliminación» de las de dichas comisiones entre Renfe y Adif. Esta versión la ofreció el que en la fecha del accidente de Angrois era presidente del Comité General de Empresa de Renfe, Juan Carlos Cañas, en la sesión del juicio del Alvia en la jornada de este miércoles.
Ahora, expuso, las comisiones de seguridad corren a cargo de la empresa operadora, Renfe, por lo que no hay ningún órgano conjunto entre ambas empresas con la misión de evaluar la seguridad en las vías. Por consiguiente, no hay otra forma por la que trasladar los posibles riesgos de la vía, sostuvo, como podría ser el caso el correo electrónico de Iglesias Mazaira alertando de la peligrosidad de la curva de A Grandeira. Las comisiones actuales «no tienen como misión evaluar el riesgo» y apuntó, además, cierta opacidad para los sindicatos y dificultades para la comunicación de cualquier incidencia: «Es directamente imposible» que los trabajadores de la operadora trasladaran las problemáticas de seguridad, respondió a preguntas del abogado de Francisco Garzón, maquinista del Alvia descarrilado y uno de los procesados.
E insistió durante su declaración que todo lo que tenga que ver con riesgos en la vía es cosa de Adif. «Tienen que tener en cuenta estos riesgos para trasladarlos a la operadora y, de forma conjunta, evaluarlos. El control le corresponde al administrador de la infraestructura», declaró en la vista.
Cañas participó en grupos de trabajo sobre seguridad ferroviaria de la Agencia Ferroviaria Europea (ERA). Cuando en 2013 el tren descarriló, dejando 80 fallecidos y 145 heridos, desde la Agencia se sorprendieron. Según Cañas, les chocó que el tren pudiera «pasar a 200 en una curva de 80 kilómetros por hora» y que no hubiera ningún sistema que lo previniera. «Es inconcebible que hubiera pasado, tampoco había balizas». También llamó la atención a nivel europeo que no hubiera ERTMS, y que «solo fuera el conductor la barrera de protección», lo que considera que es «un fallo de procedimiento». «La legislación europea manifiesta que cuando pones en servicio una línea de alta velocidad debe tener una supervisión completa», remarcó el testigo. En términos generales, la Agencia Europea establece que ha de «prevalecer» el ERTMS, ya que los sistemas nacionales figuran «en un cajón de sastre de alguna ‘ETI».
El factor humano
En una de sus intervenciones, el expresidente del Comité de Empresa, y actual secretario, declaró que no era conocedor de la Oficina del Factor Humano hasta 2018, en una reunión en Dubrovnik. Quedó de manifiesto que el órgano, por lo menos, existía desde 2011, cuando la abogada del Estado, y defensa de Adif, mostró un documento que así lo demostraba. «Lo único» que quería decir Cañas era que «lo desconocía», y además, que mientras trabajó como maquinista (hasta que quedó liberado en 2007) no había recibido ninguna formación por parte de esta oficina.
La vía (2) por la que Garzón efectuó su formación para la línea AV082 no era la del accidente (que fue la 1), pues esta todavía no estaba lista para circular. ¿Era habitual esto? «No», pero por «la necesidad de abordar una inauguración» se realizó «de la forma en la que se realizó».
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete