El Congreso aprueba derogar la sedición, rebajar la malversación y reformar la Justicia por la puerta de atrás

La Cámara baja ha dado luz verde a la proposición de ley (fórmula acelerada de PSOE y Podemos para saltarse los informes preceptivos). 184 síes, 64 votos en contra y una abstención. PP y Cs no han votado. El Pleno ha estado cargado de tensión e impugnaciones de la oposición, que ha intentado frenarlo sin éxito. La ley viajará al Senado para que se apruebe allí antes de Navidad. La oposición se ha visto maniatada durante la tramitación exprés y, según denuncian PP, Vox y Cs; «fraudulenta».

La situación es inaudita. El Tribunal Constitucional convocó una reunión urgente por la mañana para decidir si admite el recurso por «inconstitucionalidad» y «antijuricidad» del PP, donde piden frenar «de forma cautelarísima» las modificaciones que afectan al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Vox también presentó otro recurso. Pero la «complejidad» del asunto ha obligado al TC a posponer su reunión al lunes.

Iván Espinosa de los Monteros, portavoz de Vox en el Congreso; Inés Arrimadas, líder de Cs, y Cuca Gamarra, portavoz del PP, han pedido la suspensión del Pleno hasta que el TC resuelva los recursos. Y Batet se ha negado. El Constitucional podría tumbar las enmiendas de la discordia el lunes porque la reforma aún estará tramitándose en el Senado. Se trata de un episodio sin precedentes que enfrenta al Poder Judicial y al Legislativo.

Durante el debate, Arrimadas ha comparado la situación con el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 y las leyes de desconexión en el Parlament. «Estamos reviviendo lo que muchos sufrimos en 2017, es la primera vez que se produce en el Congreso, pero no la primera vez que se produce en España. El Gobierno está repitiendo lo mismo que hizo el separatismo en 2017, van a aprobar leyes inconstitucionales», ha dicho Arrimadas.

La líder de Cs ha tendido la mano al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, para que presente una moción de censura al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Cs no ha votado para no dar legitimidad al Pleno, como hizo en 2017 en el Parlament. Gamarra ha acusado al PSOE de «mimetizarse» con los que dieron «un golpe a la democracia» en Cataluña. «Han llegado a creerse que la democracia es solo para ustedes, o mejor dicho, son ustedes», ha añadido la popular. Además, Gamarra ha acusado a la Cámara de no respetar los derechos fundamentales de la oposición.

El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha comparecido en el escritorio del Congreso junto su grupo, que ha abandonado el Pleno. «Se ha sometido a los jueces a una presión intolerable», ha criticado Abascal; y ha añadido: «Vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano para impedir este golpe y censurar a este Gobierno».

El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha bromeado con la posibilidad de que aparezca «tejero con toga» en el Pleno, reproche a los recursos de amparo de PP y Vox, «porque ya no entran con pistolas, ahora lo hacen con togas». Rufián ha defendido su apoyo a la reforma y a desjudicializar el 'procés'. «Hay dos millones de personas en Cataluña que votan opciones independentistas y, guste más o guste menos, existen unas mayorías absolutas en el Parlament a favor de esta opción. ERC plantea vehicular este anhelo, no es un delito», ha expresado el portavoz de ERC.

Desde Bildu, Jon Iñarritu ha presentado su voto favorable y criticado «la guerra judicial» de la «extrema derecha política, judicial y mediática para bloquear al Congreso». Iñarritu también ha asegurado que van a «sacar del Constitucional a los que hace tiempo deberían haberlo abandonado». También que este es el suceso «más grave en términos democráticos después del 23-F». Mikel Legarda, de PNV, ha justificado el voto a favor de su grupo parlamentario por «la actitud obstruccionista del PP para renovar los órganos judiciales».

Jaume Asens, presidente de Unidas Podemos, también ha acusado a la derecha de «dar un golpe blando a la democracia». El debate lo ha cerrado el PSOE, con el diputado Felipe Sicilia, en términos similares al independentismo: «Hace 41 años la derecha quiso parar un Pleno del Congreso y parar la democracia (...) Quisieron pararlo con tricornios, y hoy han querido hacerlo con togar».

Desde primera hora del día, PSOE y Unidas Podemos han intentado condicionar la decisión del Constitucional sobre el recurso del PP. Los grupos parlamentarios registraron sendos escritos de personación. «Es un atropello sin precedentes de la democracia», aseguró la ministra de Hacienda y vicesecretaria del PSOE, María Jesús Montero, en Antena 3.

El 24 de noviembre fue la toma en consideración de la ley; el día 1, su debate de totalidad y el martes, la Junta de Portavoces aprobó el Pleno extraordinario de este jueves después de que la ponencia de la Comisión de Justicia incluyera en el texto mediante enmiendas rebajar la malversación y los cambios en el TC y el CGPJ.

La reforma deroga el delito de sedición y lo sustituye por uno nuevo llamado de «desórdenes públicos agravados». Este tipo contempla nuevas penas de tres a cinco años de cárcel frente a los diez y 15 actuales. Además, PSOE y ERC llegaron a un acuerdo -apoyado por Unidas Podemos- para rebajar el delito de malversación sin lucro personal.

Los políticos independentistas investigados por el 'procés' podrían beneficiarse ya que se trata de una reforma 'a la carta'. ERC espera que se revise la sentencia de su líder, Oriol Junqueras, para rehabilitarlo como candidato electoral si los jueces coinciden con la interpretación de la nueva norma que hace ERC.

También incluye con calzador un párrafo de enmienda en su exposición de motivos para «aclarar» la voluntad del Ejecutivo con el fiasco de la ley del 'solo sí es sí' debido al goteo de revisión a la baja de sentencias a abusadores sexuales.