La «desfachatez» de la representante del Ejecutivo central en la Comunidad Valenciana -a su juicio- ha quedado patente porque «mintió porque sabía que Mazón no estaba allí y dijo que lo vio, mintió a la prensa», además de que la última semana ha cambiado su versión de lo ocurrido.
Por lo tanto, Camarero se ha preguntado retóricamente si hay que creerse a «la Pilar Bernabé de antes o a la de ahora», al no mantener su mismo relato de lo acontecido en el órgano de gestión de las emergencias en el que, de nuevo, ha reiterado que el presidente de la Generalitat no tenía obligación de estar presente porque «no forma parte».
En una rueda de prensa tensa para informar de la reunión del Consell, la dirigente autonómica ha rehusado responder a preguntas insistentes de los medios sobre la hora de llegada de Mazón y cómo él mismo había dicho inicialmente que lo hizo «pasadas las siete de la tarde», cuando ahora se revela que fue mucho después, pues la alerta se envió a la población por SMS sin que él estuviera presente a las 20.11 horas.
Preguntada por qué «ocupaciones más importantes» tenía el presidente esa tarde, Camarero ha aludido a que «ya ha demostrado que estaba haciendo y lo ha contestado en numerosas ocasiones» y, principalmente, ha subrayado que la comunicación oficial se ha hecho en la causa judicial abierta por la gestión de la catástrofe del 29 de octubre, que causó 224 muertes.
En cambio, Camarero ha arreciado en sus críticas a los socialistas: «El PSOE sólo ve la oportunidad de cambiar lo que decidieron las urnas», ha enfatizado, trata a su entender de «aprovechar para intentar recuperar la Generalitat» para lo que «juega con el dolor de las víctimas sólo para sacar rédito político».
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