Condenado a diez años de cárcel por provocar el suicidio de un menor en Castellón con mensajes de Whatsapp

El juez considera que hubo homicidio doloso pero sin agravante de superioridad lo que rebaja la pena. De hecho, la Fiscalía solicitaba una condena de catorce años de prisión y la acusación particular elevaba su petición hasta los quince.

El condenado tiene 62 años en la actualidad. En el momento de los hechos la víctima apenas contaba con catorce. Era el 1 de diciembre de 2016. Iván entabló comunicación con el hombre que ahora ha sido juzgado en una página de contactos en internet. Al poco tiempo decidió abandonar la conversación tras admitir a su interlocutor que era menor de edad.

En ese momento, el ahora condenado empezó a acosar al joven a través de mensajes amenazantes mediante Whatsapp durante siete horas: «Vas a llorar lágrimas de sangre delante de los jueces y de tus padres».

El menor le llegó a decir hasta en once ocasiones que se quitaría la vida si persistía con su actitud. «Me voy a suicidar»; le dijo. Su interlocutor replicó que «eso es cosa tuya, si te suicidas, les dejarás el marrón a tus papás» y mantuvo su hostigamiento.

De acuerdo con el veredicto del jurado, «era sabedor de la angustia y el desasosiego que le estaba causando, hasta el extremo de querer quitarse la vida, y conociendo la alta probabilidad de que se produjera la muerte del menor y aceptándolo, continuó mandándole mensajes».

Finalmente, la tarde de ese mismo 1 de diciembre, la víctima saltó al vacío por el patio interior del edificio de su domicilio y falleció en el acto. Algunas de las expresiones que recoge las conclusiones de la Fiscalía que le escribió a través de la aplicación móvil son «aquí cuando se hace esto es para follar», «ahora atente a las consecuencias», «te vas a cagar, lo juro por mi madre» o «maricona, hazte el tonto».

La Audiencia de Castellón le ha impuesto una pena de diez años de cárcel. La sentencia, que puede ser recurrida ahora en apelación ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana, fija indemnizaciones por un total de 173.000 euros a favor de los padres y el hermano del fallecido por daños morales.