Bono Cesta de la Compra: requisitos y cómo solicitar los 90 euros de la Generalitat Valenciana

Así lo ha explicado en un acto celebrado en el Palau de la Generalitat en el que ha estado acompañado por, entre otros, el presidente de la patronal valenciana, Salvador Navarro, quien por su parte ha detallado que las grandes superficies y los comercios agrupados en Confecomerç han previsto facilitar vales de compra y proporcionar alimentos -por un importe global de un millón de euros-, cuya entrega gestionarán ONG. Al acto han asistido también los secretarios generales de UGT PV y CCOO, representantes de los distribuidores y del pequeño comercio.

Según han detallado fuentes de la Conselleria de Hacienda, existe una web informativa sobre la iniciativa https://bonocesta.gva.es/. A partir de ahora, desde el 15-18 de abril se podrá presentar la solicitud, la Agencia Tributaria Valenciana comprobará que se reúnen los requisitos; se comunicará cuándo pueden recogerla -los puntos de distribución están por determinar, pero serán por toda la Comunitat Valenciana- y no hará falta activarla porque es de uso directo.

La directora general de Coordinación del Diálogo Social, Zulima Pérez, ha explicado que se trata de una actuación para ayudar a las familias por el incremento de los precios de los productos básicos del día a día como consecuencia de la guerra en Ucrania, que ha supuesto un incremento de los costes energéticos que se ha trasladado a la cesta de la compra, incluido el precio de los alimentos básicos, sin que ese incremento haya ido acompañado de un aumento equivalente en los salarios.

Pérez ha recordado que hace unos meses la Generalitat impulsó el plan de respuesta inmediata Reactiva, parte de cuyas medidas ya se han puesto en marcha, y ahora anuncia este bono cesta de la compra, que ha asegurado que pone de manifiesto las características de la Comunitat Valenciana de «acuerdo y diálogo» con las partes implicadas.

Por su parte, el presidente de la CEV ha agradecido al pequeño comercio y las grandes distribuidoras el «esfuerzo» de meses de trabajo para aportar a esta iniciativa y a los equipos técnicos de la propia patronal, de la Asociación Nacional de Grandes Empresas de la Distribución (Anged); Asociación de Supermercados de la Comunitat Valenciana (Asucova) y pequeño comercio representado en Confercomerç.

Navarro ha detallado que en los últimos meses han buscado la fórmula de colaborar y grandes superficies, supermercados y pequeño comercio han decidido facilitar esos vales por valor de un millón de euros, cuyo reparto gestionarán ONG y asociaciones sin ánimo de lucro «para asegurarnos que llegan a las personas que más lo necesitan».

El presidente de la patronal ha defendido que están haciendo «todo lo que está en sus manos» y ha apuntado que la capacidad de ayudar de las entidades es «limitada» porque también se enfrentan a un importante incremento de costes y «los márgenes se están reduciendo».

En este línea, ha indicado que el porcentaje de ayuda comprometida «está por encima de los margenes de estas empresas» y que es la fórmula que permite la ley porque «cualquier otra opción no pasaría el control de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia» y ha defendido, por último, que esto se añade a que cada distribuidor «ya está haciendo esfuerzos por ofrecer el mejor precio posible respetando la ley de la Cadena Alimentaria y son perjuicio ni de industria no de productores».

Navarro también ha apuntado que este «no es ejercicio de resosnabilidad aislado» ya que «a través de la plataforma Compromiso CEV estamos ayudando a colectivos más vulnerables, siendo nexo entre las empresas comprometidas y colectivos en riesgo de exclusión y hoy somos nexo entre supermercados y pequeño comercio y familias que necesitan ayuda en la cesta de la compra». «Es justo reconocer nuestra aportacion a la sociedad», ha concluido.

Por su parte, Puig ha apuntado que este «punto de llegada» se ha alcanzado tras «muchas conversaciones y diálogo», que es «una seña de identidad de la Comunitat Valenciana», que ha permitido generar una respuesta en la pandemia y en este momento. Entre otras acciones, ha citad el Plan reactiva, las ayudas en el transporte o la reforma fiscal aprobada por unanimidad en Les Corts, a propuesta del Gobierno, que pretende que las rentas medias y bajas con más dificultad en un momento inflacionario «tengan el mejor respaldo posible del conjunto de la sociedad».

Puig ha subrayado el «enorme esfuerzo» que supone esta iniciativa para las arcas públicas, por lo que ha agradecido el trabajo del conseler de Hacienda, Arcadi España, ha valorado que esto genera «un paso más entre la confianza en los valencianos de llegar a acuerdos y generar un escenario positivo para la convivencia, la inversión y la actividad económica».

«Esta iniciativa va al corazón de las economías domésticas, a las neveras, desde la cooperacion pública-privada», ha expuesto, y ha hecho hincapié en la «dificultad técnica» que ha supuesto perfilarla dada la cantidad de actores implicados y para que cualquier persona pueda ir a cualquier comercio de alimentación a gastarla.

La iniciativa funcionará con una tarjeta bancaria prepago, con un saldo de 90 euros, activada por cuatro meses en la primera edición, desde mediados de abril y hasta el 15 julio y dirigida a residentes en la Comunitat Valenciana cuya renta familiar no supere los 21.000 euros -más de medio millón-, compatible con Ingreso Mínimo Vital y Renta Valenciana de Inclusión y con la ayuda de 200 euros del Gobierno.

Puig, que ha hecho hincapié en que «no puede ser una acción universal, sino que va dirigida a atajar la fractura social en las familias con menos renta», ha señalado que el proceso de solicitud será «sencillo», de manera telemática, y al que se ayudará desde ONG, Ayuntamientos o asociaciones de consumidores para facilitar la accesibilidad de los usuarios.

«Había dos opciones: 'sálvese quien pueda o multiplicar la acción pública, gestionar para la mayoría de la sociedad, y hemos optado por la segunda opción a través del diálogo», ha indicado el presidente, que ha agradecido el respaldo de CEV, sindicatos, empresas de distribución y pequeño comercio, y «a cada uno de los que harán posible que sea un programa de éxito que pueda llegar a una mayoría de personas a las que se va ayudar en momento de dificultad». En esta línea, ha dicho que era «una exigencia ética» con la que se ha dado un paso adelante y se espera dar más en el futuro.