Por mucho que el equipo de gobierno del socialista Sergio Carrasco trata de justificarlo alegando que este incremento del tributo local se debe a un desfase presupuestario de 3,4 millones de euros en 2023 del que la culpa sus antecesores, los populares liderados por Rafael Serralta por estrategia electoralista en año de comicios locales, el descontento parece generalizado y no convencen estas razones.
Ese porcentaje puede entrañar incrementos de entre 250 y 300 euros al año para los propietarios de viviendas en el tradicionalmente conocido como centro nacional del juguete, por la concentración de industrias del sector, sede de la asociación nacional de fabricantes (AEFJ).
«Como ciudadanos profundamente afectados, nos encontramos ante una problemática que nos ha tocado muy de cerca: se pretende aplicar una subida exagerada e injustificada de un 62% al impuesto de bienes e inmuebles«, argumenta el impulsor de la campaña de recogida de firmas en contra en change.org, ampliamente compartida en WhatsApp.
«Esta situación surge a raíz de una gestión deficiente, no porque los ciudadanos deban cargar con costos adicionales. Esta injusta iniciativa impactará directamente a todas aquellas personas que cuentan con propiedades, aumentando su carga fiscal de manera desproporcionada«, añaden.
Finalmente, reclaman parar la decisión y buscan la movilización ciudadana «Es por esto que instamos a las autoridades correspondientes a reconsiderar esta medida. Pedimos tu firma para sumar fuerzas y exigir juntos a nuestros representantes que no apliquen esta subida del 62% al Impuesto de Bienes Inmuebles. Firmemos esta petición y hagamos que nuestras voces sean escuchadas«.
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