Mercadona recrea una vivienda para probar nuevos productos con sus clientes

Las instalaciones se han levantado sobre una nave de 5.700 metros cuadrados en el polígono Fuente del Jarro de la localidad valenciana de Paterna y suponen una inversión de 3,5 millones de euros, según adelanta este jueves «Levante-EMV» .

La compañía implantó en el año 2011 el llamado Modelo de Coinnovación , basado en «compartir con los clientes experiencias de consumo, limpieza del hogar, aseo personal y cuidado de mascotas».

En la actualidad, la compañía ya tiene repartidos por toda España un total de catorce centros de coinnovación en los que trabajan cerca de un centenar de monitores especializados en más de una veintena de catergorías de consumo. Estos empleados son los responsables de «captar y observar, a pie de tienda, las preferencias y necesidades» de los «Jefes», conforme define Mercadona a los clientes en su jerga interna.

Durante el pasado año, los clientes de la compañía participaron en 6.100 sesiones para aportar sus sugerencias. El resultado fue la incorporación de trescientos nuevos productos al surtido que ofrece la empresa en sus lineales. Además, se introdujeron mejoras en otras 350 referencias.

Gracias a la interlocución directa con los clientes, Mercadona traslada los proyectos a sus proveedores que nutren sus lineales. Fruto de esa colaboración, se ha implantado una nueva gama de productos saludables como el bimi , el kale , el ajo negro o el edamame.

En 2016, de los laboratorios de ideas compartidos con los clientes surgió también la horchata fresca de temporada con Denominación de Origen Valencia, que preserva el sabor de la bebida elaborada en las horchaterías tradicionales.

Las instalaciones de Paterna se convertirán en el principal «laboratorio de ideas» de Mercadona por su extensión, toda vez que la mayoría de centros de estas características de los que dispone están situado junto a sus propios supermercados.

En este mismo contexto, la empresa presidida por Juan Roig prepara su expansión en el mercado portugués, donde abrirá sus primeras tiendas en 2019, con un centro de coinnovación en la localidad de Grande Porto. El objetivo, según explican fuentes de la compañía, pasa por «adaptar la oferta a los hábitos y preferencias del consumidor» del país vecino.

La estrategia de coinovación (una suerte de laboratorio de ideas donde los clientes consumen, cocinan, limpian y se asean junto a los profesionales de la empresa para cribar aquellos productos que pueden resultar más atractivos antes de que lleguen a los lineales de los supermercados) ha sido objeto de estudio en Estados Unidos durante la prestigiosa Conferencia PICMET en Portland . En este foro internacional se puso en valor la «alianza exclusiva e innovadora con sus 120 interproveedores» que ha permitido lanzar productos a la media de los clientes.