«Sergio era buena persona, cariñoso y adoraba a sus padres. Nunca ha buscado peleas y no las iba a buscar ahora, porque tenía un carácter pacífico», señaló Encarna, profesora de la Academia Miguel Íscar 2, lugar donde trabaja la madre del joven vallisoletano que falleció en madrugada del sábado ... mientras celebraba una despedida de soltero en la plaza de la Flora de Burgos a causa de una agresión por parte de otro varón.
Tras la celebración de un minuto de silencio ante la fachada del Ayuntamiento de Valladolid, donde estuvo presente el alcalde, Jesús Julio Carnero, junto al resto del equipo de Gobierno, Encarna, acompañada por varios alumnos y docentes de la academia que portaban una pancarta de apoyo, pidió justicia, porque el «que la hace la tiene que pagar», dijo.
Aseguró que se trata de un delito de odio al haber recibido un puñetazo por el simple hecho de ser de Valladolid, porque «no se justifica de otra forma», más si cabe todavía al propinar un golpe en una zona donde dejaba a una persona como la ha dejado, aseveró.
De igual forma se mostro Sara, otra docente de la Academia Miguel Íscar 2, quien dejó patente su sentimiento al carecer de palabras para describir lo ocurrido. Comentó que Sergio Delgado era un chico «muy cercano», que conocían desde pequeño, y una «persona maravillosa», informa Ical.
«Se trataba de un chico muy cariñoso, afable y que siempre tenía una sonrisa en la cara, porque estaba para todos», al mismo tiempo que recalcaron que «no les cuadra» que el fatal resultado fuera consecuencia de estar inmerso en una pelea.
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