Burgos y Valladolid se unen en el dolor y condenan un crimen «inadmisible»
Consternación por la muerte de un joven en la capital burgalesa tras recibir un «fuerte puñetazo» por «su condición de vallisoletano»
Ayala y Carnero muestran el «respeto absoluto y la buena sintonía entre Burgos y Valladolid»
VALLADOLID
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Iniciar sesiónConmoción, consternación, dolor, repulsa...No existe un único sustantivo que sirva para definir el sentir de dos ciudades, Burgos y Valladolid, que ayer no podían creer que un joven de 23 años, vecino de la capital burgalesa, había matado, presuntamente, a otro de 32 por «su condición de ser de Valladolid» ... . Esa fue la conclusión a la que llegó la Policía Nacional en sus difíciles investigaciones tras la muerte de Sergio Delgado, que se encontraba en la madrugada del sábado en una zona de ocio nocturno de Burgos, conocida como La Flora, celebrando una despedida de soltero.
Lo que en principio parecía ser un hecho fortuito acabó con la detención del burgalés -al que algunas fuentes vinculan con el grupo de la izquierda radical 'Resaca Castellana'- como presunto autor de la muerte del vallisoletano, un diseñador gráfico que trabajaba en Madrid, al que propició un «fuerte puñetazo» que provocó su fallecimiento casi en el acto. Previsiblemente, el detenido por la agresión mortal pasará a disposición judicial mañana, martes.
Durante toda la jornada de ayer se multiplicaron las muestras de repulsa por una tragedia incomprensible. La alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, fue la primera en manifestar su consternación al hablar de un «delito de odio», por lo que confió en que «caiga todo el peso de la justicia sobre el agresor y también sobre las conciencias de los que alimentan este odio». «No puede ser que un chaval venga a aquí a celebrar una despedida y encuentre la muerte porque alguien le agrede por su origen. No puede ser», lamentó la regidora de Burgos e insistió en que «no es consentible que esto suceda en una ciudad como ésta, que es segura». Trasladó todo su «cariño y calor» y el de «toda la ciudad» a los familiares del joven asesinado, un hecho que consideró «absolutamente terrible».
Los alcaldes resaltan «la buena sintonía» entre ambas ciudades tras la muerte en Burgos de un joven «por ser de Valladolid»
ABCComunicado conjunto de los dos alcaldes con la «rotunda condena a cualquier acto de condena, especialmente entre los más jóvenes»
A primera hora de la tarde, los alcaldes de las dos ciudades, Cristina Ayala y Jesús Julio Carnero, hicieron público un comunicado en el que mostraron su «rotunda condena a cualquier acto de violencia, especialmente entre los más jóvenes». Ambos regidores señalaron que es «inadmisible la utilización de la violencia en cualquier lugar y situación» y abogaron «por la convivencia pacífica y por el respeto a las normas básicas de buena vecindad». Ayala y Carnero trataron de lanzar el mensaje de «respeto absoluto», así como «la buena sintonía que existe entre dos ciudades hermanas».
A través de X, el ministro de Transportes y exalcalde de Valladolid, Óscar Puente, «aplaudió» que los dos ayuntamientos «hayan hecho un comunicado conjunto con altura de miras» y añadió que «esas actitudes son necesarias 365 al año. No solo cuando ocurre una desgracia». Jesús Julio Carnero, que se mostró «horrorizado» por lo ocurrido, ha convocado para hoy a las doce, junto al resto del Equipo de Gobierno, un minuto de silencio a las puertas del consistorio en homenaje al joven vallisoletano fallecido en Burgos y a las víctimas mortales del incendio de Valencia.
También el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, se sumó al comunicado de los dos ediles y expresó su condena «a todo tipo de violencia» y su deseo de que «se esclarezcan los hechos de la trágica muerte cuanto antes». El número dos del Gobierno autonómico, Juan García-Gallardo, que es burgalés, se mostró muy indignado en la misma red social donde manifestó su «condena más rotunda» ante el «brutal asesinato». «En caso de confirmarse el detonante estaríamos asistiendo a un lamentable, violento e irracional resultado de décadas alimentando rivalidades provinciales absurdas», advirtió.
«Pocas cosas más repugnantes que se haya podido matar a alguien por el hecho de ser lo que sea, en este caso vallisoletano», lamentó García-Gallardo, por lo que urgió a «acabar con los discursos baratos de enfrentamiento entre provincias. Hay que reconstruir los afectos y volver a defender lo propio desde lo común».Otro burgalés, el secretario autonómico del PSOE, Luis Tudanca, se preguntó «cómo es posible que el odio llegue tan lejos». «Nada justifica la violencia. Nada», afirmó y exigió «que se haga justicia».
Sobre el suceso se pronunció también en la red social 'X' el presidente de Vox, Santiago Abascal, quien se refirió a la presunta relación del detenido con el grupo de la izquierda radical 'Resaca Castellana' para denunciar que «otra vez, la violencia extrema de la izquierda utiliza cualquier excusa para desencadenar su salvajismo» «(...) Este es el resultado de no desarticular hasta los cimientos todas las organizaciones que esparcen su odio y su violencia. Descanse en paz la víctima, y que no descansen los responsables políticos hasta erradicar esta lacra».
También en la red social se ha pronunciado el colectivo aludido, 'Resaca Castellana', que además de «lamentar los hechos ocurridos» en la madrugada del sábado, ha manifestado «no tener ningún tipo de vinculación con tales actos ni con ninguna de las personas implicadas».
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