El «homenaje póstumo» de Delibes a su «mejor mitad»
Fotografías, correspondencia, manuscritos y objetos personales forman parte de una exposición que conmemora en Valladolid el 50 aniversario del fallecimiento de Ángeles de Castro, «inseparable compañera» del escritor
Lección de imaginería con sus «grandes colosos»

«Vengo a rendir aquí público homenaje a la memoria de la que durante cerca de 30 años fue mi inseparable compañera», señalaba Miguel Delibes en su ingreso en la Real Academia Española en 1975 en reconocimiento a la «aportación fundamental» que su mujer, ... Ángeles de Castro, tuvo en su trayectoria vital y literaria. Ella había muerto en año antes, en 1974, y su temprano fallecimiento había sumido al escritor vallisoletano en una profunda crisis creativa. A lo largo de sus tres décadas de vida juntos, el apoyo de Ángeles de Castro había sido clave, no sólo a la hora de asumir la responsabilidad de los asuntos domésticos y la supervisión de la educación de sus siete hijos, sino también por ser «la primera y más crítica lectora de sus obras», además de una inyección de «alegría y optimismo» en un hombre de carácter pesimista -a veces incluso depresivo-. Él lo reconocería varias veces en público, también en vida de ella. «A Ángeles de Castro de Delibes, el equilibrio, mi equilibrio», rezaba la dedicatoria que le escribía en 'Diario de un emigrante'.
De este cariñoso mensaje toma el nombre la exposición 'Ángeles, el equilibrio de Delibes', organizada para conmemorar el 50 aniversario de la mujer que inspiró 'Señora de rojo sobre fondo gris', una de las obras claves del vallisoletano.
Desde este viernes y hasta el próximo 19 de enero se puede ver en la Sala de Exposiciones del Pabellón de Cristal de la vallisoletana Acera de Recoletos. El lugar no ha sido escogido al azar, pues se encuentra junto al Campo Grande que tantas veces paseó el autor de 'El camino' y frente a uno de las casas donde vivió.
De la muestra ha dicho Germán Delibes, hijo del matrimonio y presidente de la Fundación que lleva el nombre del escritor, que no ha sido concebida como «un homenaje a nuestra madre», sino como «un último homenaje póstumo de su esposo Miguel Delibes», ya que el hilo conductor de la misma, cuyo grueso está formado por fotografías del álbum familiar, lo constituyen una serie de textos del novelista y de otras personas que los conocieron «cantando las virtudes de Ángeles».
«Está objetivamente acreditada por estudios la fuerte influencia que Ángeles tuvo en Delibes, que se plasmó en enriquecer su perspectiva vital (...), en mantener una faceta social cuando esto era necesario o en aportar una visión a la vez práctica pero también elegante de cotidiano, que facilitó al escritor el ecosistema necesario para desarrollar toda su capacidad creativa y alcanzar su máximo potencial», ha destacado Fernando Zamácola, director de la Fundación Miguel Delibes.

La muestra comienza con un breve texto introductorio al que sigue un diagrama que representa lo principales 'hitos' de la vida de Ángeles. El objetivo es «dar un contexto al público», que podrá ver a continuación una buena parte del álbum familiar, con instantáneas que recogen la infancia y juventud de Ángeles, con otras de su noviazgo con Miguel, la familia, los niños, el pueblo burgalés Sedano donde tantos veranos pasaron... Además, son recogidos algunos de sus viajes, instantes de la vida social y los últimos momentos ligados a las enfermedad.
Valladolid también tiene en la exposición «un lugar especial», con imágenes que recogen diferentes rincones de la ciudad como la pérgola del Campo Grande, la orilla del río Pisuerga o las casas donde vivieron. La última parte está dedicada a la obra 'Señora de rojo sobre fondo gris', con reproducciones del manuscrito y del famoso cuadro de Eduardo García Benito que luego ha sido portada de la novela. Incluye también un cartel de su adaptación teatral, así como ejemplares del libro en diferentes idiomas.
En vitrinas se puede ver, entre otros curiosos objetos, la máquina de escribir que Ángeles de Castro dio a Delibes como «regalo de pedida» y que -ha recordado Zamácola- «utilizó muy poco porque le gustaba más escribir a mano rasgando el papel». También las agujas con las que Ángeles hacía punto y una pequeña selección de las «casi mil» cartas de condolencias que el escritor recibió de amigos de la familia tras la muerte de su mujer, entre ellos Carmen Laforet, Julián Marías, Carmen Martín Gaite, Vela Zanetti...
«Esta es una buenísima exposición que nos da otra perspectiva del escritor», ha destacado en la inauguración el alcalde de la ciudad, Jesús Julio Carnero, para quien la muestra supone también «un canto a la familia», una institución «que desde determinados ámbitos o sectores está cayendo en la indiferencia o no es fomentada lo suficiente».
La muestra es acompañada de un catálogo prologado por José F. Peláez, columnista de ABC y El Norte de Castilla, diario del que Miguel Delibes fue director y de cuyo archivo han salido parte de los fondos para la misma.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete