Thierry Fischer: «Queremos que la energía musical se traslade a nuestro alrededor como pasa con el fútbol»

Ha estado al frente de la OSCyL en más ocasiones, pero en el programa de hoy y mañana será la primera vez que lo haga como director titular. ¿Qué siente estos días de ensayos?

El mismo placer, pero con una responsabilidad distinta. Lo que digo, mis intenciones, mis ideas musicales... Todo está directamente relacionado con la visión que tengo de cómo juntos vamos a desarrollar la Orquesta.

¿Qué le atrajo principalmente de este proyecto para embarcarse en él?

-Para mí es un desafío, y para desarrollar ese reto musical lo que necesito es tener unas herramientas adecuadas, un ambiente saludable. Es lo que vi cuando vine por primera vez aquí hace casi un año. Observé una ambición muy sana, un grupo de músicos con conocimiento y experiencia, y con muchas ganas de trabajar, de absorber ideas para elevar sus estándares. También está el fantástico auditorio, y luego España, un país que no conozco demasiado. He pasado distintas fases de mi vida trabajando en diversos lugares, y en esta etapa este país me resultaba muy atractivo. Mi objetivo realmente es ese, crear excelencia y conseguir grandes cosas con todos estos elementos.

Lleva al Auditorio un sugerente programa, con Haydn, Brahms y el concierto 'Never give up' ('Nunca te rindas'), que el compositor turco Fazil Say compuso tras los atentados de París y Estambul. ¿Toda una declaración de intenciones?

Más que una declaración, es un mensaje. Tanto Jesús (gerente de la Orquesta) como yo creemos en los símbolos. El mensaje que queremos lanzar es que pese a estos años atrás tan difíciles, la música, realmente todo, tiene que continuar. Queremos que las buenas vibraciones de la música nos ayuden a tener esa mentalidad positiva.

¿Cuáles son las líneas maestras que guiarán su trabajo con la orquesta?

Las pautas principales van a ser el repertorio, los artistas invitados y solistas, así como la ejecución al más alto nivel. Queremos dotar a la Orquesta de la capacidad de afrontar distintos tipos de repertorio. Y crear una dinámica que traspase a lo que ocurra dentro de la sala. Permítame hacer un símil con el fútbol. Es como cuando en el fin de semana ganó el equipo de tu ciudad y aunque no fuiste al partido, el lunes lo comentas en el trabajo y es motivo de orgullo. Yo creo que la energía musical es igual de contagiosa. Queremos que esa energía se traslade a nuestro alrededor con todo lo que vamos a hacer en el aspecto educativo, a nivel social y en otros tantos proyectos... Será como una espiral de creatividad.

Coincidirá con dos nuevos directores asociados, Vasily Petrenko y Elim Chan. ¿Cuál será su relación y forma de trabajar con ellos?

Te lo diré el próximo año (ríe). No obstante, la idea es que formemos un equipo, con liderazgo. Es muy importante para los músicos tener enfoques diferentes y creo que los tres tenemos cualidades muy diversas y aportaremos nuestras fortalezas.

Continuará siendo director titular de la Orquesta de São Paulo, en Brasil. ¿Le será sencillo compaginarlo?

Estoy acostumbrado. Llevo catorce años en Estados Unidos mientras tenía otros puestos, así que no supondrá ningún inconveniente.

¿Qué considera que puede trasladar de sus anteriores etapas?

Puedo traer mi experiencia (ríe). En el arte, en general, no hay recetas. No hay una fórmula. No hay una verdad. La experiencia te la da el deseo y el coraje de explorar cosas nuevas.

¿Qué repertorio le gustaría explorar con esta formación?

Es un poco pronto para contestar. Estamos comenzando a hablar ahora sobre qué dirección queremos para construir nuestros planes de futuro, estamos observando lo que está pasando y definiendo prioridades.

Fue músico antes que director. ¿Esa condición le facilita la relación con los músicos?

Sí y no. Sí, porque entiendo la dinámica, lo que los músicos esperan para poder dar lo mejor de ellos. Me ayudó mucho cuando comencé, pero no es la clave para tener éxito. Si hablas con cien directores, te contarán cien soluciones diferentes.

Hace un tiempo eran habituales las grabaciones y las giras. Se vieron paralizadas primero por la crisis, luego por la pandemia. ¿Tiene intención de retomarlas?

Por supuesto. Son dos aspectos fundamentales para el desarrollo de la Orquesta. Pero lo que hemos podido aprender de la crisis y la pandemia es que no hay que hacerlo por hacerlo. Por un lado, las giras nos hacen embajadores de nuestra región, de lo que representamos culturalmente; y por otro, las grabaciones llevan a los músicos a los límites de sus capacidades. Ahora no puedo contar más de ello, estamos trabajando y lo haremos en el futuro.

Comienza su trabajo como director titular recuperada la normalidad tras la pandemia. ¿Es un aspecto que valorará el público?

¡Por supuesto! Por lo que sé de esta formación es que tiene un público muy fiel. El hecho de saciar su sed, de que puedan volver a disfrutar de todo esto es muy importante para mí. Como director, me lo puedo pasar muy bien, pero lo que hago no es para mí ni para los músicos, tiene que colmar la ilusión, las esperanzas y las ganas de escuchar música de todo el público. En esta nueva etapa creo que lo podemos satisfacer de manera importante.

Y usted, ¿cómo percibe esa vuelta a la normalidad desde el escenario?

¡Buena pregunta! En los diversos países en los que he dirigido he notado una forma mas intensa de escuchar. Hemos pasado mucho tiempo detrás de las pantallas con conciertos, libros, películas... ¡La música es vida! Y en directo existe ese riesgo que es necesario para que alcance su esencia. Incluso el público es parte del éxito de la actuación. Si escucha con atención es una motivación para nosotros. Los conciertos se están viviendo de forma mucho más intensa y es un placer para nosotros.

¿Qué espera de este primer año como director titular?

Tenemos una temporada fantástica, grandes artistas invitados y solistas y un buen programa. Vamos a hacer un repaso al repertorio desde Haydn hasta la música contemporánea, pasando por Strauss, Brahms, Shostakóvich o Chaikovsky... Todo me dará una idea de las posibilidades de la Orquesta. Sé que tendré grandes satisfacciones.