Prudente «optimismo» ante la bajada de un 17% en los suicidios

«No podemos bajar los brazos», apuntó antes de participar en la jornada celebrada ayer en el Consejo Económico y Social (CES) de Castilla y León sobre el proyecto realizado por la Federación denominado 'Segundas Oportunidades', en el que a lo largo del último año se ha abordado un análisis de la situación en la Comunidad, así como dentro del movimiento asociativo y una serie de recomendaciones para los poderes públicos. Entre ellas, que las «políticas» de prevención de esta problemática estén «muy vinculadas al territorio», detalló Lozano. Hay provincias, dijo, en las que la tasa por cada 100.000 habitantes es «significativa» y se perciben «diferencias territoriales».

En ese sentido, destacó que Soria se encuentra a la cabeza del país en incidencia y también lo están Zamora y Palencia. Una posición que podría tener que ver con la «soledad no deseada», la ruralidad en esos puntos y la dificultad de acceso a recursos de salud mental. En el otro extremo, se encuentra Segovia, que «a lo largo de los años» se ha mantenido como uno de los lugares con tasas inferiores. Otro de los datos que se aportaron en la jornada fue que a lo largo de los últimos diez años de movimiento asociativo 32 personas atendidas fallecieron por suicidio. El «apoyo cercano, continuo y adaptado» y aportar herramientas de gestión emocional ante un «sufrimiento extremo» puede ser una «buena estrategia de prevención», detalló.

Fruto del proyecto realizado, la Federación ha puesto en marcha una formación específica y una guía para profesionales de cara a crear y gestionar los denominados Grupos de Ayuda Mutua, como espacios «seguros» para supervivientes y familiares. Además, han publicado un manual para los medios de comunicación sobre cómo abordar este tipo de informaciones.

«Yo hace cinco años pensaba que no se debía hablar de suicidio», recordaba la presidenta de la Federación de Salud Mental, Elena Briongos, pero en los últimos tiempos se ha generado un cambio de planteamiento a través del cual «ahora» se ha entendido que referirse a estas situaciones puede ayudar a «prevenirlo». También de la mano de las asociaciones, expresó, un lugar en el que mostrar «cómo estás o cómo te sientes». Participó también en el encuentro la directora general de Asistencia Sanitaria y Humanización de la Junta, Silvia Fernández, quien recordó que Castilla y León fue de las «primeras» autonomías en disponer de una estrategia propia contra el suicidio, a la que se dará «continuidad».

Destacó, además, el nuevo plan regional de salud mental, «presentado a principios de este año», que recoge en una de sus siete líneas de trabajo la «prevención» de este tipo de muertes. Por su parte, el presidente del Consejo Económico y Social de la Comunidad, Enrique Cabero, habló de la necesidad de aportar una «respuesta colectiva» ante un «problema muy grave» que genera once fallecimientos al día en España. En ese sentido, consideró que ha habido un «cambio en el planteamiento» que ya ha dado «resultados» con una tendencia «a la baja» y ha permitido «salvar vidas».