La Junta ve «un gran paso en igualdad» la apuesta de Feijóo de una EBAU única

«Es un esfuerzo que merece la pena», ha defendido Carriedo, quien ha coincidido con su compañera de Gabinete en que el camino para lograrlo no va a ser precisamente de rosas. De hecho, desde el Ejecutivo central, la ministra de Educación, Pilar Alegría, ya ha dejado claro que no comparte la iniciativa. «La propuesta es fuego de artificio. No es legal. Creo que no se va a llevar a efecto porque no es posible, no es una propuesta seria», ha sentenciado. «Lástima que el Gobierno no quiera colaborar en esto», ha lamentado Carriedo.

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Aún así, desde la Junta de Castilla y León no están dispuestos a tirar la toalla en una batalla en la que lleva peleando tiempo, cuenta con el apoyo «unánime» de las Cortes y ha llevado incluso a movilizaciones en la calle con respaldo de diferente signo, ha recordado al portavoz, quien aprovecha para reprochar que «no» le «parece bien» y «no» ve «lógico» que «rápidamente» algunos se muestren en contra de esa EBAU únicamente «por motivo ideológico».

«Que sea más difícil no significa que sea imposible», ha defendido Carriedo. «El hecho de que sea difícil no nos puede paralizar», ha recalcado también Lucas. «Podemos hacer algo y tenemos el deber de intentarlo», ha incidido la consejera de Educación, quien ha valorado que por el momento son once las comunidades que se van a sentar «en una mesa a trabajar por una prueba común dentro de nuestras competencias».

«No vamos a cometer ninguna ilegalidad», ha subrayado el portavoz, quien ha recriminado que el Gobierno «no» quiera liderar esa unificación, «pero tampoco le parece bien que las comunidades avancen» en esta dirección. «Lo vamos a hacer hasta donde podamos llegar», ha apuntado en su intención en proseguir por ese camino. «Se puede hacer mucho: acordar fechas o criterios de corrección, entre otras cuestiones», ha señalado la consejera de Educación, quien ha destacado que esas once autonomías suman el 70 por ciento del alumnado. Y, ambos han reiterado, la iniciativa está «abierta» a que se sumen las diecisiete. Lo «lógico» es que si el distrito de acceso a la universidad es «único», la prueba de acceso también sea común.

Ese examen común será «mejor», ha insistido Carriedo, quien no ha entrado a si elevará o bajará el nivel -Castilla y León siempre ha estado a la cabeza en exigencia-. Será, ha afirmado, «más igual, con más calidad y garantizando la unidad». Y es que, ha argumentado, «no hay mayor igualdad que tener el mismo examen de acceso a la universidad». «Lo llamativo es que lo que más hagan por la igualdad y la unidad sean las comunidades autónomas, mientras el Gobierno de España trabaja en la desigualdad y la división», ha reprochado de paso Carriedo, para quien que el Ejecutivo de Pedro Sánchez «no quiera colaborar» es «coherente con lo que hace: generar desigualdades y división entre los españoles.