Castilla y León y mucho más, a debate
El pleno sobre Política General de la Comunidad que arranca el martes llega en medio de la crispación política instalada en España y tras el «no» a Feijóo
Vox ve «inadmisibles» las «agresiones verbales» de Tudanca
Mañueco interviene en el Debate de Política General celebrado en junio de 2020
Los socios del Gobierno de Castilla y León, PP y Vox, justificaron allá por el mes de junio el aplazamiento del Debate sobre Política General, que se tenía que hacer celebrado antes de julio, en que si se llevaba a cabo se vería contaminado ... por la campaña electoral para las generales 23 de julio. Se quería evitar esta situación para poder centrarse en los problemas reales de la Comunidad y, sobre todo, plantear acciones de futuro. Finalmente, se dejó pasar el Pleno de Investidura de Alberto Núñez Feijóo, de modo que la cita será el próximo martes y miércoles, aunque es previsible que el objetivo de que la política nacional no se inmiscuya no se logrará.
Alfonso Fernández Mañueco afrontará su segundo debate sobre el estado de la Comunidad desde que asumió la Presidencia de la Junta en julio de 2019. 2021 fue el año de la moción de censura presentada y perdida por el PSOE. Así que hay que remontarse hasta el 30 de junio de 2020 para encontrar esta cita parlamentaria, ya que el pasado año, se convocaron las elecciones adelantadas, en febrero, y tampoco hubo lugar. Mañueco ya anunció este septiembre su intención de plantear en ese pleno la necesidad de «dar un nuevo impulso político» en Castilla y León que sirva para demostrar «el peso» de la Comunidad en el contexto nacional con algunos pilares básicos: crecimiento económico, desarrollo rural, mejora de los servicios sociales e igualdad. Avanzó, además, que después se reunirá con todos los grupos para analizar la situación política, aunque precisó que esperará unas semanas para fijar esos encuentros en el calendario.
Con resaca
De esta forma, el martes tendrá lugar el debate número 20 de cuantos se han celebrado hasta ahora en el Parlamento autonómico y lo hará con unos ingredientes inéditos en un momento de convulsión política nacional y también regional que suma enteros tras la fallida investidura de Feijóo del pasado viernes y la irrupción por sorpresa del vallisoletano Óscar Puente para hacer las veces de Pedro Sánchez y contestar al líder popular. Así que conseguir que el debate sobre el estado de la Comunidad se limite sólo a eso será una auténtica quimera, con los tres partidos mayoritarios en el hemiciclo -PP, PSOE y Vox- aún con la resaca por lo ocurrido en la Carrera de San Jerónimo.
Así que unos y otros llegan al pleno con todo el arsenal preparado. Los populares, porque se sienten humillados por el desplante de Pedro Sánchez al no dignarse a responder a su líder. Pero es que, además, ya ha comenzado el segundo capítulo, el que llevará a que el líder socialista se pueda mantener en la Moncloa, lo que sólo conseguiría gracias al apoyo de los independentistas catalanes, previo pago de la amnistía a los golpistas. Ese será, sin duda, uno de los argumentos de los que se servirá el PP de Castilla y León que, además, dibujará una Comunidad ultrajada por el pago económico que dará Sánchez a los nacionalistas para recompensar su apoyo.
El portavoz del Grupo Popular en las Cortes autonómicas, Raúl de la Hoz, ha alentado estos días a hacer un debate «en positivo», con propuestas y proyectos y ha pedido a los socialistas que abandonen «las trincheras y los insultos». Al igual que Vox, el PP trasmitirá el mensaje de un Gobierno de coalición unido y leal y juntos llevarán a la sesión del miércoles un documento con 60 propuestas.
En las filas del PSOE, sus primeros, el portavoz parlamentario y secretario autonómico, Luis Tudanca, y la responsable de Organización, Ana Sánchez, ya dejaron claro su entusiasmo con la intervención de Puente, primero, y la no investidura de Feijóo, después. Una euforia que trasladarán al hemiciclo castellano y leonés como ganadores que se sienten, aunque en Castilla y León lleven lustros sin gobernar. El pacto PP-Vox en la Comunidad volverá a ser su principal hilo argumental con sus habituales denuncias de recorte de derechos que, a su juicio, han provocado los de Abascal. «Voy a ir con la actitud de siempre, la defensa de Castilla y León y de la gente de esta tierra frente a un gobierno que le esta haciendo un daño absoluto y que no cree en esta Comunidad», ha sentenciado Luis Tudanca, que también ha advertido de que habrá «una oposición dura y rotunda al peor gobierno de nuestra historia y al más radical».
También dos de los tres procuradores del Grupo Mixto, Francisco Igea y Pablo Fernández (Unidas Podemos) se sumarán a la fiesta del debate. El primero, ya expulsado de Ciudadanos, pondrá voz por primera vez a la recién nacida plataforma Nexo, de la que forma parte y, el segundo, tratará de dar visibilidad a su partido, que quedó desdibujado en el Congreso.
Quedan las formaciones localistas, UPL, Soria ¡Ya! y Por Ávila que, curiosamente, son los que siempre rehúsan en sus intervenciones a hacerse eco de la política nacional. Eso sí, sus aportaciones tampoco son en clave autonómica sino siempre limitadas a su parcela provincial.