Protesta contra la 'privatización' del legado de Alberto Sánchez tras la cesión a la Fundación Roberto Polo

Convocados por los sindicatos STAS CLM, CCOO y la Asociación de Amigos del Museo de Santa Cruz ¿Vivo!, los asistentes han querido reivindicar con carteles como «Piratas al caribe», «Polo, sin chanchullos, los Albertos no son tuyos», «Alberto no lo permitiría», que las piezas del artista toledano vuelvan al espacio del que nunca debieron salir para ser cedidos a un coleccionista privado.

Rafael García Serrano, presidente de la Asociación del Museo de Santa Cruz ¡Vivo! y exdirector de esta pinacoteca, ha explicado que la apertura de la exposición dedicada a Alberto Sánchez, en la sacristía del Centro de Arte Moderno y Contemporáneo de Castilla-La Mancha, tenía que haberse utilizado para ampliar la parte expositiva de este museo, «y para la mejora y modernización de los servicios que requiere un museo del siglo XXI».

Además, García ha denunciado que la rehabilitación del edificio del Centro de Arte Contemporáneo (financiada por el Gobierno de España, que es el propietario), iba a ser utilizado para instalar allí las colecciones de la época medieval y en el antiguo hospital las obras de los siglos XV, XVI, XVII y del XVIII.

«Una vez rehabilitado el edificio no llegaron a colocarse estas colecciones y la Junta -que tiene cedida la gestión- ha estado organizando exposiciones temporales», ha recordado el exdirector del Santa Cruz, que ha remarcado que fue el Gobierno regional, con la complicidad del ministerio, «que miró para otro lado», los que facilitaron que se entregara ese edificio al coleccionista Roberto Polo.

«La Junta le ha dado a este señor (Roberto Polo) dos tercios del Santa Cruz, incluido el crucero que ahora está vacío y que no se puede utilizar para montar allí las colecciones», se ha quejado Rafael García Serrano. «El museo está como piojo en costura. Hay unos fondos importantísimos, pero desgraciadamente están almacenados».

Desde que en 2001 cerrara el Museo de Arte Contemporáneo en Toledo, en la llamada Casa de las Cadenas, las obras del republicano escultor se guardaron en los almacenes del Museo de Santa Cruz. La decisión de la Junta de Comunidades de ceder sus obras a la Colección Roberto Polo ha sido ampliamente criticada y «la indignación» del personal público ha llevado a convocar la protesta.

«El buen hacer de los compañeros de conservación ha permitido tener sus obras y tantas otras más en buen estado», aseguraba Teresa López, delegada sindical de STAS, quien ha asegurado que las obras de Sánchez en ningún momento han estado desatendidas.

Por su parte, la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, también se ha referido a este asunto y ha afirmado que «con el tiempo» se podría buscar una ubicación «más adecuada» para exponer las piezas del artista Alberto Sánchez que se exhiben desde la semana pasada en el espacio que se ha inaugurado en la Colección Roberto Polo. Con todo, se ha alegrado de que estas «magnificas piezas» se exhiban.

A la protesta de este lunes se han sumado también representantes políticos de Podemos, Izquierda Unida, Ciudadanos, Partido Popular o Más País, así como decenas de vecinos de Toledo que han querido mostrar su apoyo a esta reivindicación.