Tintoretto y El Greco se unen en una exposición que exhibe la mirada veneciana de los artistas

Este martes, 25 de febrero se abre esta muestra que permanecerá abierta en la biblioteca del museo toledano hasta el 8 de junio y que por primera vez, exhibe los trazos del artista veneciano, junto a los cuadros del pintor cretense Doménikos Theotokópoulos, más conocido como El Greco.

La restauradora del museo, Carolina Tobella ha explicado en rueda de prensa que se trata de una exposición muy pequeña, pero de gran entidad. «En esta muestra confrontamos la obra de dos pintores que pertenecen a una de las generaciones con más peso dentro de la historia del arte occidental, como son Tintoretto y el Greco».

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Junto a esta obra, cuelgan dos cuadros de la colección permanente que posee el museo del pintor cretense, como son los dos retratos que El Greco pintó de Antonio de Covarrubias y de Diego de Covarrubias. Las tres pinturas, de estilo manieristas, datan de finales del siglo XVI.

Carolina Tobella ha explicado que que en el compendio pictórico de Tintorreto, así como en los cuadros de El Greco se puede comprobar que las composiciones son muy similares. Ambos desprenden «esa influencia veneciana», en las que destacan una «introspección psicológica de los personajes».

Los personajes -ha remarcado la restauradora- son hombres mayores, ancianos que desde su mirada «se muestran poderosos» que no disimulan su vejez, sino que además la convierten en una cualidad, «prácticamente en paradigma de sabiduría, de serenidad y de poder».

Tintoretto fue uno de los retratistas más prolíficos de la República Veneciana, y durante su carrera realizó retratos de muchas de las personalidades de la ciudad. 'Retrato de un senador' presenta muchas de las características de su producción, al mostrar el busto del retratado con el cuerpo de tres cuartos sobre un fondo oscuro, orientando la mirada hacia al espectador y captando magistralmente su expresión y fisionomía.

La obra de Tintoretto fue muy influyente en la trayectoria del Greco, quien residió en Venecia entre 1567 y 1570 y llegó al punto de referirse al mismo como uno de los seis mejores artistas de la historia. Esta influencia es bastante reconocible en la faceta como retratista del cretense, quien introdujo en el seno de la sociedad castellana una forma de retrato de clara herencia veneciana. Por tanto, 'Tintoretto. La huella veneciana' pone en evidencia los paralelismos en la producción de ambos autores.

El Museo de El Greco con motivo de esta exposición va a celebrar diferentes actividades, como conferencias sobre la obra de Tintoretto para que el visitante pueda descubrir tanto el legado del pintor veneciano como del Greco.