La menor de 17 años quemada viva en Canarias señaló a su agresor: «Me lanzó un papel prendido»

La joven, de nacionalidad española y tutelada por el Gobierno de Canarias y residente en uno de los centros de menores de la isla, se debate ahora entre la vida y la muerte tras ser evacuada de urgencia en un avión medicalizado a la unidad de quemados de Sevilla.

El agresor, un joven de nacionalidad marroquí de 20 años que llegó en una neumática el pasado 2 de junio a Lanzarote y con una orden de expulsión en vigor, no quiso hablar en el momento del incidente, pero ya en su declaración ante la Policía ha asegurado que fue un accidente. De acuerdo a sus palabras, estaban fumando y se prendió fuego el colchón que compartían.

Los vecinos del barrio de La Isleta, en Las Palmas de Gran Canaria, alertaron al 112 de la declaración de un incendio en una infravivienda en el número 85 de la calle Angostura, donde encontraron un escenario aterrador que hizo saltar todas las alarmas. Abarrafia llevaba solo unos calzoncillos, sin camiseta ni pantalones, y apenas a unos metros estaba ella, con quemaduras por todo el cuerpo. «Me lanzó un papel prendido. Fue él», dijo la víctima antes de ser intubada.

La menor fue trasladada de urgencia a la unidad de quemados del Hospital Universitario Doctor Negrín de Gran Canaria, donde ingresó en estado crítico, para después de ser estabilizada viajar a Sevilla, centro de referencia en víctimas de quemaduras. Él también fue evacuado al hospital por inhalación de humo, custodiado. Al mediodía recibió el alta y los agentes lo trasladaron a comisaría a la espera de pasar a disposición judicial. Ya en dependencias policiales y con un intérprete le tomaron declaración, manteniendo la versión de que fue un incendio accidental, y que se había prendido el colchón que compartían mientras fumaban.

Mientras la investigación sigue abierta y se toma declaración a testigos y personas del entorno de ambos, allegados de la menor han asegurado que entre ellos había una relación sentimental reciente, y que solía fugarse del centro de menores para verse con él. El centro ha confirmado que la menor se había fugado en otras ocasiones del centro, en el que residía desde hacía años, y que en el momento de los hechos llevaba fuera tres días, desde el viernes.

El Juzgado de Violencia sobre la Mujer Número 2 de Las Palmas de Gran Canaria se ha inhibido a favor del Juzgado de Instrucción Número 4 de la capital grancanaria al considerar que «no está acreditada la relación afectiva» de la joven con el presunto agresor. Las diligencias previas pasan a conocimiento del juzgado que estaba de guardia cuando sucedieron los hechos.

La Policía Nacional ha activado un protocolo especial de vigilancia que estará operativo varios días y durante las 24 horas, con el fin de evitar altercados violentos. Entre las pesquisas que arrojan luz al caso está, además del testimonio de la menor, la presencia de líquido inflamable.