Camps reduce a «relatos absurdos» las delaciones en su contra al pie del banquillo por el caso Gürtel

A diez minutos de la hora señalada, Camps atendía a la prensa a las puertas de la sede judicial en San Fernando de Henares (Madrid), donde la afluencia era extraordinaria por la coincidencia de dos macroprocesos: la pieza número 5 de Gürtel por la que comparte banquillo con otras 26 personas, incluidas tres que fueron sus consellers, y el dirigido contra la rama balear de los Ángeles del Infierno, donde son medio centenar los acusados, parte de ellos de nacionalidad alemana, lo que ha atraído prensa extranjera.

Sin embargo, al poco de arrancar el juicio de Gürtel se ha suspendido. La defensa de Camps ya había pedido sin éxito que se pospusiera para poder acceder a determinados documentos de la causa que no ha conseguido manejar. Hoy ha verbalizado la misma reivindicación ante la Sección Segunda de la Sala de lo Penal que le juzga y el tribunal ha atendido su pretensión: «Si causamos indefensión a una parte es peor que se declare luego una nulidad y tener que empezar de nuevo meses o años después», ha dicho el presidente, José Antonio Mora.

Camps lleva imputado algo más de 13 años y ha sido absuelto de los 9 asuntos que le han salpicado, como la Fórmula 1, la visita del Papa a Valencia o el caso trajes, que se saldó con una sentencia confirmada en el Tribunal Supremo que negaba su connivencia con los responsables de las empresas de Gürtel. Esta es la décima y última causa que tiene pendiente.

Desde esa posición, se mostraba seguro ante la prensa de que llegará a las diez de diez e incluso reafirmaba su confianza en retomar la vida política cuando esa absolución que da por hecha, se produzca. «Nadie de las personas que están siendo juzgadas se ha llevado un solo euro al bolsillo. No ha habido ni una transferencia de dinero público a ningún sitio que no sea el pago de aquellas cosas que se hicieron con esos contratos. No hay malversación, ni enriquecimiento injusto ni dinero para el Partido Popular», ha destacado.

Preguntado por los escritos de reconocimiento de hechos y conformidad con la Fiscalía que han presentado varios trabajadores de Orange Market, la matriz de la trama Gürtel y que podrían incriminarle, como Álvaro López, conocido como 'El Bigotes'.

«Han pactado con la Fiscalía Anticorrupción y eso lo sabe toda España. Es un pacto espurio», ha señalado. Para Camps contienen «relatos absurdos que no tienen ningún tipo de sustento» y que por ello, no deben ser considerados como válidos.

Junto a Camps se sientan en el banquillo otras 26 personas, incluidas tres exconsellers del que fue su Gobierno, situación que atribuye a una campaña en su contra, en concreto, de Ximo Puig. «Es presidente de la Generalitat Valenciana porque me persiguió de forma histérica», ha llegado a afirmar, subrayando que la Abogacía de la comunidad autónoma ejerce acusación en este juicio con alto coste económico para todos los valencianos.

De hecho, es uno de sus escritos a los que no ha tenido acceso aún la defensa de Camps porque está recién presentado, como ha explicado el presidente del tribunal, que ante las quejas de distintos letrados que apostaban por continuar con las sesiones, suspendía el juicio durante una semana para dar tiempo a quien no tenga toda la documentación, a acudir a la Secretaría de la Sección a consultarla. «Espero que esta pesadilla que es muy larga muy dura y brutal termine de una vez por todas», había dicho Camps antes de entrar.

El principio de ese final en el que confía, tendrá todavía que esperar. Las sesiones se retoman el próximo lunes.