La Audiencia Nacional avala la entrada en Tsunami de un tercer policía herido en los disturbios en Cataluña

En una resolución a la que tuvo acceso ABC, el tribunal califica de «evidente» que las lesiones sufridas por este agente, que quedó en coma tras sufrir un impacto en el casco y tuvo que acogerse a una jubilación forzosa a los 41 años de edad debido a las secuelas, «forman parte del objeto de este proceso».

«También lo es la legitimación para personarse en el proceso como acusador particular, pues no puede ponerse en duda su condición de perjudicado, ofendido o víctima de las infracciones penales asociadas a ese hecho, si es que estas llegan a acreditarse», señala.

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Isabel Vega

Conforme razona, la existencia de indicios de participación de Tsunami Democràtic o de sus miembros en los hechos que tuvieron como resultado las lesiones «en nada afecta a los presupuestos de la legitimación» porque «ningún obstáculo constituye a la personación» que este agente también hubiese estado al inicio personado en las diligencias que se seguían en Barcelona por aquellos disturbios y de las que se salió al no ver futuro al procedimiento. «No consta que fuese una renuncia al ejercicio de acciones», recuerda la Sala.

En la misma línea, no ve «óbice a la personación» en el hecho de que este agente, uno de los heridos más graves en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que se desplegaron aquellos días en Barcelona, «de una indemnización por las lesiones».

«Sin perjuicio de que su actuación en el proceso puede limitarse al ejercicio de la acción penal, no hay constancia de que haya renunciado al ejercicio de acciones civiles derivadas de las infracciones penales que pudieran ser aquí establecidas y, además, esas responsabilidades civiles podrían ser de importe superior a las indemnizaciones ya percibidas», dice la Sección.

Se confirma así que los tres miembros de las Unidades de Intervención de la Policía Nacional que solicitaron ejercer la acusación particular en la causa podrán exigir responsabilidades penales, movimiento al que la Fiscalía se oponía porque, conforme argumentaba, no veía relación entre la actuación de los presuntos promotores de Tsunami Democràtic, entre los que se encuentran la secretaria de organización de ERC Marta Rovira o, ya en el Supremo, el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, y las lesiones sufridas por los agentes desplegados en las calles.