Nueva normalidad: El veraneo del coronavirus en las playas de Andalucía

Fuentes municipales confirmaron que en el caso de Barbate este domingo sólo se llenó Zahora, donde hubo que cortar la entrada durante algunas horas, mientras que Zahara y Caños de Meca no completaron aforo , como sí ocurrió el sábado. En Tarifa desde el mediodía quedó cerrada la playa de Bolonia , como ocurrió el sábado, y también se llenaron Los Lances y Valdevaqueros.

En Conil nuevamente se cerraron sus playas más pequeñas, las calas en la urbanización de Roche, como la del Aceite y la del Pato. En Vejer se llenó uno de los doce sectores en los que está dividida la playa de El Palmar con motivo de las medidas sanitarias, pero no fue necesario cerrar los accesos, sino simplemente distribuir a los bañistas.

Ocurrió lo mismo en Chiclana, donde se llenaron algunos tramos de La Barrosa y Sancti Petri , tal y como ha revelaba a media tarde la aplicación móvil del Ayuntamiento que informa de los aforos, pero Protección Civil se encargó de dirigir a los usuarios a otras zonas donde sí había más espacio.

El Ayuntamiento de Cádiz informó a las 14 horas que iba a ser necesario cortar los accesos a sus playas más pequeñas, La Caleta y Santa María del Mar , pero, finalmente, al acudir menos bañistas de los esperados y marcharse algunos de los que estaban, no se llegó a cerrar en ningún momento. Según el Plan de Contingencia el aforo máximo permitido en la playa de La Caleta es de 2.586 personas mientras que el de Santa María es de 3.648. Este problema de limitación de espacio no lo tienen la playa de La Victoria, con un aforo de 21.684 personas ni la de Cortadura, cuya cifra asciende a 41.863 personas hasta su conexión con Torregorda.

Chipiona , una de las localidades costeras de Cádiz que más visitantes concentra en verano, ha estrenado este fin de semana su plan de contingencia contra el coronavirus, por el que podrán bajar a las playas de Chipiona algo más de 60.000 bañistas cuando esté la marea baja, que serán sólo 43.000 cuando haya marea alta . Se trata de una cifra, que supone la cuarta parte de la capacidad de estas playas y que es importante si se tiene en cuenta que, aunque Chipiona no llega a los 20.000 habitantes en verano alcanza picos de hasta 150.000 personas en la localidad, según fuentes municipales. La playa de Regla tendrá un aforo limitado a 10.000 personas con pleamar que se elevará en 2.324 personas más en situación de bajamar. En cuanto a la playa de la Cruz del Mar, se ha limitado el aforo a poco más de 5.300 personas en pleamar, a los que se sumarán otros 1.664 cuando esté la marea baja.

En Las Tres Piedras entrarán unas 6.700 bañistas , que subirán en 2.320 personas más cuando esté la marea baja. En el caso de Las Canteras sólo entrarán 192 personas con la pleamar y 960 con bajamar, mientras que en la parte chipionera de Costa Ballena podrán estar unos 3.859 en pleamar a los que se sumarán otros 1.800 en bajamar. Ese control de aforo, que se pone en marcha también en otras playas como Montijo, Niño de Oro, La laguna y Camarón.

Por su parte, la provincia de Huelva vivió una ausencia de incidentes en el primer fin de semana de temporada alta para el turismo, que coincidió con temperaturas elevadas y el fin del estado de alarma. En contraste, las carreteras de acceso a las playas y la A-49 , con la que la provincia conecta con Sevilla, registraron un tráfico denso , registrándose incluso algún atasco en el puente sobre el río Odiel a consecuencia de una avería. Desde Ayamonte hasta Matalascañas, la extensión de las playas de Huelva -con 120 kilómetros de litoral- han contribuido a que no se hayan producido aglomeraciones o incidencias .