Estas son las zonas de Andalucía donde no hay médicos suficientes ni profesores

No es el único ejemplo de cómo la administración en Andalucía tiene a veces problemas de planificación a la hora de completar su plantilla. También ocurre en el ámbito sanitario, donde determinadas épocas del año -verano y Navidad, fundamentalmente- ponen de relieve la falta de profesionales . No es solo un problema que afecte a quienes aspiren a un puesto de médico o de profesor. Es un problema también para los usuarios de los servicios públicos. «Sin profesionales o con falta de ellos es el ciudadano el que tiene peor servicio, peor sanidad o peor educación », protestan las centrales sindicales.

La falta de previsión, acusan los sindicatos, pone en entredicho los servicios públicos por los que la Junta de Andalucía saca pecho justo en las épocas del año más críticas de cada área: en verano para la Sanidad y en el inicio de curso en el caso de Educación .

En sanidad, los profesionales no solo hablan de falta de profesionales . Ponen de relieve que el problema está también en determinadas áreas de Andalucía donde no se quiere ir nadie. Lo que llaman áreas de difícil cobertura. Se trata, explican, de zonas muy concretas. «Hablamos del Campo de Gibraltar , del Noreste de Almería y el Norte de Huelva», explica Rafael Carrasco, presidente del Sindicato de Médicos de Andalucía (SMA). Las razones para que los profesionales sanitarios no se quieran ir allí son varias: « Todas esas zonas tienen cosas en común : tienen una población dispersa, pocas comunicaciones y están lejos de núcleos de población grande».

El problema no es solo económico (que también, protestan los sindicatos). Es que además en esas partes de Andalucía existe la complicación del transporte. «Para ir desde Gibraltar a Bolonia tienes que hacer hora y media en coche, aunque las separen solo 20 kilómetros -añade Carrasco- y que además en algunos casos se trata de sitios deprimidos, conflictivos».

Aunque el panorama que dibujan los sindicatos no es muy positivo, sí que reconocen que la Junta está intentando ofrecer puestos más atractivos para los trabajadores. El problema es que no acaba de cuajar y además, llega a destiempo. Es la opinión de Eloísa Bernal, la delegada de Salud del sindicato CSIF. «La Junta está intentando hacer contrataciones más atractivas, hay una intención. Pero luego pasa como en el Campo de Gibraltar, que ofrece contratos de muy poco tiempo y claro, así no se fideliza a ningún trabajador para que se quede en la zona».

La solución a este problema la tiene muy clara Carrasco, de SMA: «Si se hubiera hecho una oposición de las plazas para las que faltan profesionales, se podrían haber cubierto las plazas más problemáticas».

La Consejería de Salud reconoce el problema de falta de personal: «Andalucía tiene el mayor volumen de plantilla de profesionales sanitarios del conjunto del Sistema Nacional de Salud, con más de 95.600 efectivos. A pesar de esto, la comunidad autónoma, como el resto del territorio español, cuenta con escasez de profesionales en determinadas categorías».

Según datos de la propia administración andaluza, el problema más grave lo tiene con Anestesiología y Reanimación, Dermatología Médico Quirúrgica, Cardiología, Cirugía Ortopédica y Traumatología , Medicina Física y Rehabilitación, Medicina Intensiva, Neumología, Pediatría, Urología y Medicina Preventiva. A estas se suman las especialidades de Medicina de Familia y Pediatría de Primaria en las zonas rurales.

Coinciden en el análisis los sindicatos. Rafael Carrasco apunta directamente a la Junta como culpable de ese problema : «La política de recursos humanos de la Junta de Andalucía es “aquí te pillo y aquí te mato”. Siempre promete soluciones y le da a todo mucha propaganda pero luego no arregla nada».

La desesperanza del sector sanitario lo comparten los profesionales de Educación que trabajan en el sistema público andaluz . Justo en el momento crítico para el sistema, con el inicio de curso, han salido a la luz las miserias de la organización de la Junta.

Hay determinadas especialidades para las que es difícil dar con profesores. Así lo explica el delegado para Educación de CSIF Francisco Hidalgo, quien recalca que hay problemas con Matemáticas, Física y Química, Tecnología o Informática. El proceso habitual, explica el delegado para Educación de CSIF, es que cuando faltan profesores se llama por orden de lista a quienes están en las bolsas. ¿Qué ha pasado este año? «Falta total de previsión», resume Hidalgo. «Nosotros en mayo advertimos a la Consejería de Educación en una mesa sectorial de que había bolsas en las que iba a haber problemas y no hicieron nada».

Pese a la advertencia, ni en mayo ni en todo el verano se tomaron medidas, denuncian. Solo con la llegada del inicio de curso abrieron de forma extraordinaria bolsas para las categorías más demandadas. Tarde. «Entonces ya no había tiempo material para llamar uno a uno a los que estaban en bolsa, así que se recurrió al acto público», explican los sindicatos.

El problema en Educación, explican fuentes del sector, es más grave aún. «Las bolsas de trabajo son mentira, ficticias », denuncian. «Tú puedes creer que tienes cien personas en una especialidad, pero no es verdad porque hay mucha gente que está trabajando en otras comunidades autónomas o de otra cosa que no es docencia pero no se dan de baja».

Falta de previsión, perfiles profesionales sin cubrir, áreas de Andalucía donde los sanitarios o los docente sno quieren ir... Según los trabajadores, los problemas de la Sanidad y a Educación en Andalucía -los servicios públicos que la Junta califica como sus «joyas de la corona»- funcionan gracias al tesón de sus profesionales, pero no por la gestión de la administración.