Los sindicatos denuncian ante Inspección de Trabajo la falta de protección de los sanitarios

Por ello, el sindicato se está dirigiendo, tanto a nivel autonómico como provincial, a las Inspecciones de Trabajo y Seguridad Social, así como a las de Servicios o denominación correspondiente según la autonomía, para reclamar que se investiguen los hechos denunciados en cada caso y que se adopten «con urgencia» las medidas pertinentes a fin de garantizar los derechos de los profesionales y del resto de la población.

En sus escritos de denuncia, el sindicato subraya que la falta del material de protección necesario supone un claro incumplimiento de las normas que hasta la fecha se han dictado por parte de las autoridades estatales y autonómicas, así como un grave atentado contra el derecho a la salud y la integridad física y psíquica de los profesionales y de otras personas de su entorno, como los pacientes, familiares o compañeros de trabajo.

Satse recuerda que los profesionales sanitarios atienden todas las alertas de los pacientes que puedan ser sospechosos de estar infectados por el COVID-19, ya sea en los hospitales, centros de salud, otros centros sanitarios y sociosanitarios y domicilios particulares, por lo que es «obligatorio» que cuenten con los Equipos de Protección Individual.

También la Confederación Sindical del Trabajo (CGT) ha denunciado ante la Inspección de Trabajo de Málaga, al Servicio Andaluz de Salud por los centros de trabajo siguientes: Hospital Clínico Universitario Virgen de la Victoria, Hospital Regional de Málaga en sus pabellones de Carlos Haya y Materno. En su escrito hablan de posibles incumplimientos en materia de prevención de riesgos laborales. Se basan en el comunicado del 25 de marzo por parte de la Consejería de Salud, donde se refleja que hay en Andalucía 3010 pacientes infectados y de ellos 624 personal de los servicios de salud. Eso significa que el 20.7 % de los afectados en Andalucía es personal sanitario, acumulando ya dos fallecimientos entre este personal. «La tasa del 20,7% supera ampliamente el 12% de Madrid, el 8% de Italia y el 4% de China», señala el sindicato.

Luego elabora una larga lista con la falta de equipos de protección: «No hay mascarillas FFP2 ni 3 disponibles para las plantas en las que solo se atiende a personalde coronavirus . Hay días que faltan uniformes desechables y gorros de protección. Las gafas que hay son de uso compartido, se reutilizan lavándolas con productos agresivos y se rompen con frecuencia posiblemente por el uso de los mismos, no hay garantía de la efectividad de las mismas. No hay gafas para todo el mundo en un turno. Hay limitada disponibilidad de pantallas faciales que proceden de una donación, las pantallas son de uso compartido y se desinfectan tras cada turno, no hay pantallas para todo el mundo en un turno. No se ha definido un procedimiento a seguir ni un área para desinfectar dichos equipos por lo que cada uno hace lo que cree oportuno . La pantalla tiene una goma espuma, hemos visto ponerse una pantalla lavada a la que no se le ha secado la goma espuma y caerle a la persona el liquido contenido en la goma espuma en la cara y los ojos».

«No hay disponibilidad de batas impermeables en muchos turnos, -continua la denuncia-, cuando hay no hay para todo el mundo. En teoría batas y mandiles son de un solo uso pero ante la falta de suministro se están reutilizando entre turnos mediante la aplicación de desinfectante. En las plantas se realizan todo tipo de atenciones incluidas actividades que generan aerosoles y la plantilla las realiza equipadas con una mascarilla quirúrgica. Las mascarillas quirúrgicas se entregan una por persona y turno, determinados cargos intermedios recomiendan reutilizarla varios turnos para economizar, se ha llegado a mencionar la posibilidad de desinfectarlas cada uno no se sabe ni como ni cuando ni donde. Hay determinados profesionales que están prestando servicio en un ambiente de alta carga vírica y se les esta diciendo que no deben de llevar ni mascarilla quirúrgica». Y por último, apuntan que «en los días previos al decreto de alarma, en los centros referidos se instaba a los profesionales a no utilizar equipos de protección por no alarmar a la ciudadanía», concluye el sindicato que cree que se está exponiendo sobremanera al personal sanitario.