Los huéspedes deberán hacerse test de antígenos gratuitos a su llegada para acceder a las instalaciones y a aquellos que viajen fuera de España a su regreso se les facilitarán las pruebas necesarias, aunque con coste adicional.
La cadena ha invertido 180 millones de euros en el que es el primer hotel de la marca en España. Ayer lunes comenzaron a llegar los primeros turistas para alojarse en alguna de las 411 habitaciones y suites distribuidas en los siete edificios del complejo.
Cuenta con 4.000 metros cuadrados de zonas verdes y piscinas y funcionará bajo el concepto 'Infinite Lifestyle', que incluye -entre otros servicios- vehículos a disposición de los clientes para hacer turismo, 300 vinos internacionales seleccionados, servicio de camareros en la playa y durante 24 horas en las habitaciones, así como una guardería profesional con programa de actividades para niños.
Los clientes más exigentes podrán además acceder a la línea de servicios Deluxe Collection, que incluye privilegios como el disfrute de una piscina privada .
La propuesta gastronómica ha sido diseñada por los chefs con estrella Michelín David Ibarboure y Ettore Botrini tanto en el buffet mediterráneo como en sus seis restaurantes a la carta, que incluyen cocina italiana, griega y francesa. El Ikos Andalusia será también el primer establecimiento de la cadena que incluya un restaurante dedicado a la cocina local española : Oliva.
Según las estimaciones de la compañía, el nuevo complejo podría generar hasta 635 puestos de trabajo en la zona. Es el quinto resort de la cadena, que cuenta ya con Ikos Dassia y Ikos Aria en las islas griegas de Corfú y Cos, y los Ikos Oceania y Olivia, ubicados en la península de Calcídica, también en el país heleno.
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