Venden por diez euros una campana que habían hurtado en una iglesia

Con la finalidad de identificar y detener al presunto autor, se estableció un dispositivo que daba sus primeros frutos unas horas después de que se hubiese denunciado el hurto, cuando los agentes identificaron y localizaron al autor material. Se trataba de un joven del barrio de la Cruz Verde.

Según las indagaciones, el joven ya con la campana en su poder, se la dio a su padre que seguidamente la vendió en una tienda de antigüedades por diez euros.

Los investigadores recuperaron la campana e inmediatamente fue devuelta a la parroquia de donde fue sustraída.

Finalmente los agentes detuvieron al autor material del hurto y a su padre, así como el responsable de la tienda de antigüedades –que una vez habían adquirido la campana no habían dejado constancia documental alguna por la compra y por la que habían pagado diez euros– por un presunto delito de receptación .