Podemos pide suprimir el nombre de los cementerios de Jaén de San Fernando y San Eufrasio

En la moción, que se presentará en el pleno del 30 de noviembre, Podemos plantea que la corporación jiennnse acuerde no ceder ni donar suelo público o inmuebles para la construcción de edificios, monumentos o para el uso privativo o actividades de las confesiones religiosas. Tampoco para centros docentes de su titularidad .

La formación es partidaria también de que el Ayuntamiento suprima la simbología religiosa tanto de sus dependencias como de los centros de enseñanza públicos al objeto de «cumplir con los principios de separación y neutralidad de la Administración». Salva del pogromo a los símbolos que tengan «un valor histórico, artístico y cultural que justifiquen su conservación o cuya retirada pudiera ocasionar un daño arquitectónico o estético irreversible».

Adelante Jaén propone en la moción, suscrita junto a Andalucía Laica, que Ayuntamiento no tenga patrones religiosos ni conceda distinciones a «imágenes religiosas, advocaciones o figuras del santoral» . Y plantea además suprimir la presencia oficial de la Policía Local en actos de carácter religioso, al tiempo que exige que ninguna autoridad municipal ni funcionario participen en calidad de tales en las ceremonias religiosas.

Otra propuesta de la moción es que los actos religiosos que impliquen el uso de la vía pública se lleve a cabo la misma tramitación que los promovidos por cualquier organización privada , si bien, en alusión posiblemente a la Semana Santa, excluye del cumplimiento de este requisito a los que constituyen un patrimonio cultural y artístico reconocido.

Adelante Jaén exige también que en las jornadas de elecciones el Ayuntamiento intervenga para que los centros privados que se utilicen como colegios electorales «estén libres de simbología religiosa o de cualquier otra naturaleza ideológica» .

Para el portavoz del grupo popular en el Ayuntamiento de Jaén, Manuel Bonilla , la moción es un ataque no únicamente a los sentimientos religiosos de los católicos, sino también, en su opinión, a la propia identidad de Jaén, que se configura históricamente, como el resto de Europa, en torno al humanismo cristiano. Bonilla añade que suprimir el componente religioso del ser humano es una vieja y fracasada pretensión del comunismo .