La Junta asfixia a la Universidad de Granada

La parlamentaria andaluza del PP, Marifrán Carazo, ha exigido que se abone esta deuda con la Universidad de Granada (UGR) antes de final de curso porque esa falta de pago dificulta el día a día de docentes, investigadores, proveedores y alumnos.

Se cierne «un futuro incierto» sobre esta institución académica que pertenece «a Granada y a su provincia», ha lamentado Carazo que planteará este jueves esta cuestión al consejero de Economía y Conocimiento, Antonio Ramírez de Arellano, exigiéndole «plazos fijos y claros» en la sesión de control al Gobierno andaluz en el Parlamento.

La deuda, reconocida por la propia Junta, asciende a 112 millones de euros, una cantidad que, entre otras muchas cosas, afecta negativamente a una parte esencial del tejido productivo de la provincia, la pequeña y mediana empresa.

«Muchos proveedores han dejado de serlo porque no han podido resistir demoras tan largas en el cobro de sus facturas, a veces de un año, y otras empresas han tenido que reducir sus plantillas», se ha quejado la dirigente del PP que ha añadido que el problema también perjudica a los investigadores quienes «en ocasiones han tenido que adelantar su dinero para la compra de material y esperar después un año para recuperarlo».

Especialmente sangrante le parece a la parlamentaria que la Junta siga adeudando a la Universidad 78 millones por la construcción de la nueva Facultad de Medicina en el Parque Tecnológico de la Salud. Los prometió en el año 2010 y todavía no ha llegado ni un euro. Procedía del Banco Europeo de Inversiones para una finalidad concreta pero, al no ingresarse, «la Universidad ha construido la facultad a pulmón», ha enfatizado Carazo que ha llamado a la presidenta Susana Díaz a solventar el desaguisado «sin poner parches ni hacer pequeños ingresos con cuentagotas».