La alcaldía de Granada: un conflicto muy incómodo para los socios de la Junta

El objetivo es salvar al Gobierno andaluz, dejarlo al margen de una historia que parece sacada de una serie política danesa o norteamericana, ya que se mezclan las ambiciones personales con los liderazgos y las estrategias políticas de los aparatos de los partidos a nivel regional, amén de algún que otro personaje.

Y en eso están de acuerdo los responsables políticos de ambas formaciones consultadas por ABC. Por muy complicada que sea la situación en Granada, aunque allí se deterioren más las relaciones entre ambos partidos, no afectará al Ejecutivo de la Junta de Andalucía. Ahí hay acuerdo total y sin fisuras porque ni Juanma Moreno ni Juan Marín quieren un adelanto electoral. El presidente lo ha dicho cada vez que ha tenido oportunidad y Juan Marín sabe mejor que nadie la situación de debilidad de Ciudadanos.

En este escenario, los responsables de ambos partidos explican a ABC que hay pactos de Ciudadanos con el PP en Córdoba y con el PSOE en Jaén y no ha pasado nada por ello. Incluso en el pueblo de Marín, Sanlúcar de Barrameda, el acuerdo es entre Ciudadanos y el PSOE. Son administraciones independientes y así seguirán siendo.

Claro que el problema en este caso es que las direcciones regionales de PP y Ciudadanos, las que controlan Juanma Moreno, Elías Bendodo y Loles López por el PP, y Juan Marín y Mónica Moreno por Ciudadanos, han estado al margen de este conflicto.

Salvador es un verso suelto —que ni siquiera consultó con sus superiores lo que iba a decir ayer cuando compareció ante los medios— y Sebastián Pérez lleva años preparando su venganza contra quien ostenta la Alcaldía que él deseaba. Entre ambos, Fran Hervías, ahora sentado a la derecha de Teodoro García Egea el secretario general del PP, y a quien todos señalan como el manijero de esta operación.

Y esta interferencia tiene consecuencias por más que ayer varias fuentes las negaban. Moreno y Marín firmaron un pacto de no agresión en Andalucía, asegurando que ningún cargo de Ciudadanos pasaría al PP que es en lo que está trabajando Hervías siguiendo la estrategia que le ha marcado García Egea. Hasta ahora había sido así —el PP andaluz frenó el fichaje de Marta Escrivá, exviceconsejera de Educación— pero ahora, con lo sucedido en Granada, donde Ciudadanos se ha quedado sólo con dos de los cuatro concejales que tenía, todo parece haberse vuelto del revés.

Los cuadros de PP y Cs en Andalucía miran estupefactos el «espectáculo» que se está dando. Desde el lado popular explican que la situación en Granada «era insostenible» mientras que los naranja asisten a una situación «delirante».

Lo peor puede estar por llegar. Porque el PSOE asiste desde la barrera a esta crisis pendientes de cuánto aguantará Salvador en la Alcaldía con dos concejales. Le han ofrecido varias salidas —incluyendo la Junta— que ha rechazado hasta ahora. PP y Cs en Andalucía aseguran entenderse muy bien pero la realidad es que no han sido capaces de resolver un mero «conflicto local».