Diez años de parón en el proyecto de la Ronda Norte de Córdoba con un litigio y la obra a medio hacer

El proyecto surgió de un convenio entre el Ayuntamiento de Córdoba y Marín-Hilinger , principal responsable de la junta de compensación de la bolsa de suelo de Mirabueno. Esta compañía, actualmente desaparecida, poseía el 87% de los derechos del suelo en el barrio, donde llegó a construir una urbanización que es ya un barrio consolidado.

El Consistorio dio el visto bueno para el complejo residencial , pero a cambio de que la empresa hiciese y pagase también los dos kilómetros y medio de la Ronda Norte que estaban a su nombre. En un primer momento, la Ronda Norte se pensó como una vía de alta capacidad para dar salida a todo el distrito Norte hasta la zona Este. El PGOU estableció que era un sistema general que debía financiar el promotor de la zona a costa de los beneficios que le iba a reportar la venta de las viviendas .

Para asegurarse la construcción, se pidió a Marín-Hilinger que depositase un aval bancario de diez millones de euros, que se ejecutaría en caso de no completar la obra. Los temores finalmente se hicieron realidad y en 2008, con el estallido de la crisis económica, se detuvo la ejecución del viario, que se encontraba aproximadamente al 40% de su ejecución total por parte de la junta de compensación.

Ante esta situación, la empresa denunció al Ayuntamiento por sobrecostes y le exigió doce millones de euros, dando lugar a una larguísima batalla judicial. El conflicto se solucionó ocho años después, cuando el Ayuntamiento de Córdoba ganó el litigio , por lo que pasó a disponer de diez millones de euros con los que efectuar los trabajos de construcción de la Ronda Norte.