La corporación ha comunicado que la Junta de Gobierno estudió la invitación y ha decidido aceptar la presencia de la Señora de Córdoba en la gran procesión y en la muestra que tiene que realizarse en la Catedral en los días siguientes.
La propuesta sustituye a la procesión extraordinaria que los hermanos habían aprobado en enero por los 50 años de la declaración del pueblo de Córdoba como hermano de honor. En su lugar habrá una misa solemne, con la presencia institucional del Ayuntamiento, el 17 de mayo.
Además, por esta efeméride, el alcalde de Córdoba, José María Bellido, acompañará a la cofradía en la estación de penitencia de la hermandad en la tarde del Viernes Santo.
La cofradía había rechazo en 2013 la participación de la Virgen de los Dolores en el Vía Crucis Magno del Año de la Fe, pero sí estuvo presente en la magna Regina Mater, de imágenes coronadas canónicamente, en junio de 2015.
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