Frío, distancia y devoción: el día de la Inmaculada convoca a Córdoba en las iglesias

Las estampas estaban alejadas de las grandes escenas sobrecargadas de ajuar. No es solo por el día de veneración, si no por las previas de los montajes en los que tampoco se pueden aglomerar un número importante de hermanos para montar un altar de adoración a sus titulares. Esto quedó patente en La Compañía. La hermandad del Sepulcro rindió culto a la Inmaculada. El martes fue el día de regla y los hermanos realizaron una veneración como máxima seña de admiración a su titular.

Casi que igual de festivo fue el día en la ermita de la Alegría , hasta donde se trasladó la hermandad de la Sentencia. Nuestra Señora de Gracia y Amparo lució su nuevo manto, presentado un día antes. El aroma que se respiró en aquel templo era a cofradía clásica, con un poso importante y en un marco poco habitual.

Estampas de veneración fue lo habitual. Atrás quedó la imagen de los fieles besando la mano de la imagen a la que tanto amor le profesan. Corren otros tiempos. De más respeto, hasta incluso con los titulares. En el Naranjo, en el Campo de la Verdad, San Lorenzo o en Santa Marina se admiraron a las imágenes marianas a las que allí se le reza.

Puente Genil celebró el día de la Patrona y Alcaldesa Perpetua de la localidad, la Inmaculada Concepción, de una manera condicionada por el Covid-19. La Función del Voto estuvo presidida por Juan Ropero Pacheco y alí estuvo presente el alcalde, Esteban Morales , que renovó el voto de Patronato de 1650 en uno de los actos más solemnes de los que se celebran cada año en Puente Genil.

Ya por la tarde, la patrona bajó de su camarín hasta el dintel de la puerta principal del Santuario para veneración de todo su pueblo, sin necesidad de entrar al templo, ordenadamente y guardando las distancias, informa A. Gómez .

En Priego no se pudo celebrar la ya tradicional Vigilia de la Inmaculada. Los sacerdotes habían decidido que este año se celebraría de forma distinta, cada uno en su parroquia. En años anteriores, todos los sacerdotes de Priego y comarca celebraban en la parroquia de la Asunción la Vigilia de la Inmaculada Concepción, informa M. Osuna.

Aguilar de la Frontera , una ciudad en que el culto a la Virgen María también es muy intenso en distintas advocaciones, unió el fervor propio del día de la Inmaculada Concepción con la ayuda a los demás, tan necesaria en mitad de la crisis económica y social que ha llegado con el coronavirus.

La idea de la Agrupación de Cofradías y de las distintas parroquias de la ciudad consistía en visitar a las imágenes que estaban en veneración y llevar a sus pies alimentos, que después Cáritas repartirá entre los necesitados. Las cofradías instalaron altares en el interior de sus iglesias para venerar a las imágenes de la Virgen, y los cofrades y devotos no dudaron en acercarse con alimentos. Un total de 18 hermandades y cofradías , con residencias en seis templos distintos, participaron en esta iniciativa.

En Lucena, el día de la Inmaculada se iniciaba con los tradicionales actos de la Agrupación de Cofradías en honor a su titular. Este año se suspendió la procesión de estandartes ante el monumento a la Inmaculada en el «llanete» de San Agustín , limitándose la actividad a una ofrenda de flores y la posterior celebración eucarística en la iglesia de San Mateo. Por la tarde, el obispo de la Diócesis, Demetrio Fernández , presidió en Santo Domingo la misa con motivo del 150 aniversario de la proclamación San José como patrono de la Iglesia, informa J. M. G.