Cientos de fieles llenan la casa de la hermandad de la Cabeza

El pasado jueves, la cofradía revivió el momento que cada año esperan, partir hacia el Santuario de la Virgen de la Cabeza. Una experiencia compartida con devotos de otras corporaciones hermanas llegados desde distintos puntos de la geografía nacional. Tras llegar el viernes a la localidad jiennense, el sábado, la hermandad cordobesa se presentó en la Basílica del Real Santuario de la Virgen de la Cabeza. Los trinitarios, quienes custodian el Santuario, recibieron a la hermandad en un acto en el que mostraron sus respetos a Nuestra Señora de la Cabeza.

El domingo, día más especial para los feligreses, la lluvia dio tregua a la función principal en el Santuario y al cortejo procesional, en la que la cofradía cordobesa acompañó a la Virgen por el Cerro del Cabezo. «Este fin de semana ha sido duro porque ha llovido, pero curiosamente no lo ha hecho en ningún acto central», matiza el hermano mayor.

«Hemos llegado con satisfacción», resalta Luque que considera que la hermandad ha estado a la altura tanto en puntualidad, en organización como en su presentación: «venimos muy contentos, con un balance muy positivo», apunta.

Luque también destaca la convivencia en la casa hermandad. Al más de un centenar de devotos que hicieron noche, se suma el contacto con otras hermandades y cofrades de la ciudad que se acercaron. Asimismo, el canciller secretario general de la Diócesis de Córdoba y consiliario de la hermandad, Joaquín Alberto Nieva, también acompañó a la cofradía.

La hermandad llega de la histórica celebración para afrontar una semana especial, su semana grande en la que se desarrollaran los actos festivos de la cofradía.