El nivel de los embalses de Córdoba sube al 19% pero el de Sierra Boyera está lleno sólo al 2%

De acuerdo a los datos de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), los pantanos de la provincia de dicha cuenca, a fecha del día de hoy, almacenan 634,6 hectómetros cúbicos. Esa cantidad representa un 19,1% de la capacidad de los 13 embalses de dicha cuenca.

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David Jurado

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Si se echa la vista atrás hasta el 20 de diciembre, jornada anterior a que el calendario marcara la entrada de la actual estación, se comprueba que estos pantanos contenían 585,8 hectómetros cúbicos, un 17,6% de la capacidad total. Es decir, en lo que va de invierno, la cantidad de agua embalsada ha aumentado un 8,3%, gracias a que se guardan 48,8 hectómetros cúbicos más. El nivel de llenado sube, además, un punto y medio.

Eso sí, al comparar los indicadores actuales con los de hace un cuatrienio, cuando no se daba un periodo de falta de lluvias tan largo como éste, se comprueba lo lejos que se está aún de una situación parecida. El 13 de febrero de 2019 había almacenados 1.748,5 hectómetros cúbicos. A fecha de ayer, eran 1.113,9 menos, lo que supone un descenso del 63,7%. Hace cuatro años, estos pantanos estaban llenos a la mitad (51,2%). Hoy, 32 puntos menos.

Pero todo esto son promedios. Cuando se pasa la lupa por cada embalse, se observa que una vez más la peor situación, con los guarismos de la CHG, se da en el embalse de Sierra Boyera. Guarda 0,77 hectómetros cúbicos, un 2% de su capacidad total. Son cifras inquietantes porque este embalse es el que abastace a unos 79.000 habitantes de 24 municipios de la parte septentrional de la provincia.

Para evitar que haya que tomar medidas drásticas como cortes de suministro a la población, desde septiembre, se ejecuta contra el crono una conexión urgente y provisional de La Colada con Sierra Boyera, que combatan la repercusión de la sequía en la parte Norte de Córdoba. Los trabajos los acomete la Confederación Hidrográfica del Guadiana, a la que pertenece La Colada. Su presupuesto es de 4,4 millones.

El presidente de Emproacsa (la empresa de aguas de la Diputación), Esteban Morales, ha señalado a ABC este lunes que, de acuerdo a las previsiones que maneja dicha sociedad provincial, con la cantidad almacenada en Sierra Boyera, hay agua para abastecer al Norte durante «un mes, seguro». «Las lluvias no han contribuido a ninguna mejora, pero hay que tener en cuenta que no hay evaporación ninguna. Y que en consumo seguimos teniendo un diez por ciento de reducción, tras el plan de ahorro efectuado», ha explicado.

Ha apuntado que lo que les traslada la Confederación del Guadiana es que «están iniciando pruebas puntuales de manera manual, de bombeo». «En este mes de margen que tenemos, está previsto que se active el trasvase. Si no hay ninguna contrariedad técnica, pronto se procederá a dicho trasvase a Sierra Boyera. No está en nuestros planes que no tengamos agua en el Norte», ha añadido.

El segundo pantano que se encuentra más vacío es el de Vadomojón. Contiene 17 hectómetros cúbicos, con lo que está al 11,6% de su posibilidad total de llenado. Completa este negativo podio el de la Breña, que es el segundo más grande de los trece analizados. Atesora 111,1 hectómetros cúbicos cuando puede contenerhasta 823,4. Es decir, está a un 13,5% de su capacidad. Eso sí, no es de abastecimiento humano. Sus usos principales son, sobre todo, para regadíos de la zona y de regulación de la cuenca.

En el otro extremo de esta clasificación, se encuentran los embalses en mejor situación. El mejor estado lo presenta el de Guadanuño. Está lleno al 90,9%. Ahora bien, hay que matizar que, con mucha diferencia, es el de menor capacidad de los 13 analizados. Puede guardar hasta 1,6 hectómetros cúbicos.

El segundo pantano con mejor situación es el del Guadalmellato. Conserva 60,4 hectómetros cúbicos de líquido elemento cuando puede llegar a almacenar 146,6. Eso se traduce en que está lleno al 41,2%. El tercero que presenta un mayor nivel de llenado se el de San Rafael de Navallana. Está al 41,3%, gracias a que conserva 64,6 hectómetros cúbicos.

Estas dos infraestructuras hidráulicas son las que entran en juego para suminitrar agua a la capital. La del Guadalmellato supone su princial fuente de abastecimiento y San Rafael de Navallana, la segundo. En septiembre, Emacsa (empresa municipal de aguas de Córdoba), indicó que el abastecimiento para los hogares de la capital está asegurado para dos años o dos años y medio.