Cómo será la transformación del estadio El Arcángel que pretende el Córdoba CF

Bellido ha querido indicar que el camino hasta este acontecimiento no ha sido sencillo, por lo que ha querido agradecer al club por «cumplir con las exigencias establecidas en el pliego».

Ahora, queda por delante un proceso de remodelaciones para adecuar las instalaciones al fútbol profesional y como quiere el Córdoba CF, un «nuevo Arcángel» a medio y largo plazo, partiendo de ideas que maneja y que tienen que encajar con la normativa y otros factores.

Tras recibir la auditoría de 108 páginas sobre el estadio por parte de la LFP, el Córdoba tiene que trabajar para cumplir las exigencias propias de Segunda División.

Primero, ya se está trabajando en la bocana de Fondo Sur en la implementación de la tecnología del sistema de videoarbitraje VAR, una herramienta obligatoria para todos los clubes de la competición.

Monterrubio, también ha querido incidir en la mejora logística actual para el acceso del estadio «no es normal que un estadio se encuentre a medio hacer desde décadas, no es normal la incomodidad que soportan nuestros abonados en el acceso al estadio, no es normal tener una Tribuna en las condiciones en la que las tenemos y, por supuesto, no es normal tener un terreno de juego que solo se explota dos veces al mes».

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En otros aspectos, se han implementado cámaras de televisión en todo el estadio para mejorar la cobertura televisiva y se está trabajando en una mejora del césped e incluso una mejora interna en comunicación y protocolos.

En esta serie de reformas La Liga es flexible, especialmente en el caso de la iluminación, un apartado dentro del estadio urge cambiar, pero que sin embargo, «no se puede actuar de forma importante en la iluminación por falta de tiempo y por falta de presupuesto, por lo que se tendrá que realizar al final de la próxima temporada», apuntaba Monterrubio.

Solamente cuando se consiga en esta primera fase dotar de estabilidad deportiva al estadio, se podrá seguir con otros puntos para el nuevo estadio.

Fernández Monterrubio declarana que su deseo es «convertir el estadio en un centro de ingresos, no en un centro de gastos como es a día de hoy. Todo ello para que a partir de ahí genere valor». Lo que se gaste en El Arcángel deberá detraerlo del límite salarial que se fije para la plantilla: a menos gasto, menos competitividad, y viceversa. Ese es el nuevo escenario.

Al realizar un balance entre perdidas y ganancias, si el club decide volcar todo su capital económico al estadio, la plantilla del Córdoba sufriría estragos para que sea competitiva. Esto es así al tener con el limite salarial de la plantilla, es decir, las gastos que se hagan en la remodelación del estadio serán sustraídos del presupuesto para la incorporación de jugadores para esta temporada, algo que es totalmente inviable si se quiere garantizar una continuidad en Segunda División.

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Por lo que tal y como ha informado Monterrubio «de cara al inicio de la temporada, vamos a solucionar lo imprescindible gastando lo menos posible», todo ello para que en el futuro «se puedan dar mejoras para nuestros aficionados y mejoras que nos permitan ingresar en el estadio».

Tal y como pudo avanzar ABC, dentro del plan de viabilidad realizado por el club, indican que «a nivel deportivo» el último objetivo es «lograr en la temporada 2026-2027 el ascenso a Primera División».

El deseo de la directiva es que la transformación del estadio se realice antes de la finalización de la primera etapa de cesión (8 años máximo), sin embargo, lo deportivo prima mucho en esta decisión al hacer «crecer o disminuir los ingresos económicos». Monterrubio ha querido aclarar que las inyecciones externas «no son la formula de trabajo», por lo que el futuro del nuevo estadio dependerá del desempeño deportivo si se consigue el ascenso o si no se consigue el objetivo de la permanencia.

Si la pelota entra, el Córdoba podrá mantenese en Segunda y obtener ingresos importantes. Si subiera a Primera, aún más. Pero también puede ocurrir que no cuaje una buena temporada y descienda, por lo que los planes volverían a truncarse, lo que influiría directamente en esa transformación del estadio.

Pero el factor fundamental para un nuevo Arcángel y llevar a cabo el proyecto que Monterubio ha dicho que también quiere impulsar Baréin se topa con la normativa urbanística. El alcalde José María Bellido ha indicado respecto a la viabilidad de la conclusión del recinto deportivo que se trata más de una «actuación urbanística» que llevará un tiempo -la innovación del Plan Especial del Arenal y del PGOU-, por lo que los deseos del club pueden no verse cumplidos si las reformas no se entablan dentro de las leyes.

Bellido ha querido aclarar que en este proceso «el Ayuntamiento va a acompañar en el camino para que el estadio crezca y sea un proyecto más ambicioso dentro de los máximos que se quieren llegar».

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Desde Infinity, existe un primer proyecto de estadio del que son conocedores Fernández Monterrubio y José María Bellido, y que ya adelantó ABC; pero, a juicio del nuevo CEO, carece de sentido. «Hay muchas ideas, pero tienen que encajar», ha apostillado este miércoles.

Ese proyecto no es del agrado de Monterrubio, que es hombre de echar el balón al suelo. De hecho, ha puesto como ejemplo el hotel que sí se permite construir ahora mismo. Un hotel cuya viabilidad debería estudiarse, pero también su gestión, su ubicación -si es la más acertada- y su volumen. El proyecto que ABC desveló contemplaba usar todo el anillo de parcela del estadio y buscaba usos lúdicos y deportivos paralelos. Era del gusto de Bellido, pero, los nuevos rectores prefieren ir con pies de plomo y jugar en esos vasos comunicantes de rentabilidad y nuevos proyectos.