Andalucía reivindica un trato singular por la presión migratoria que soporta

La situación geográfica de la región, que ya soportó una presión migratoria sin precedentes en 2018, donde todos los recursos colapsaron, y la importante llegada de migrantes que recibe cada año, conforman la base del argumentario del Gobierno andaluz que preside Juanma Moreno para plantear esta reivindicación ante la Administración central.

La reforma del artículo 35 de la Ley de Extranjería para establecer el reparto en las comunidades de los menores inmigrantes no acompañados que llegan a Canarias centrará la conferencia sectorial de hoy, El objetivo es establecer un reparto cuando la capacidad de acogida de una región supere el 150%. Andalucía ya está cerca con los recibidos del archipiélago canario, al 115% según la Junta, que sostiene que los derivados a la región tienen desbordados todos los recursos.

El Gobierno propondrá este miércoles el reparto de 400 menores migrantes —100 procedentes de Ceuta y 300 de Canarias—De ese total, a Andalucía le corresponderían 30 menores, frente a los 36 recibidos en 2023 y los 38 de 2022, según informó ayer la Consejería de Inclusión Social a Europa Press.

La consejera de Inclusión Social de la Junta, Loles López, compareció este martes ante los medios —que no pudieron formular preguntas— para denunciar el colapso de los recursos asistenciales andaluces para estos menores inmigrantes y hacer una advertencia: no aceptará más sin financiación ni tiempo para gestionar su atención. «No acogeremos a más menores inmigrantes no acompañados sin financiación ni tiempo. El Gobierno deberá además reconocer como menores los 454 que nos han colado por la puerta de atrás como adultos, y no lo decimos nosotros, lo dice la Fiscalía».

Insistió en que los recursos con los que cuenta la Junta de Andalucía están «colapsados», con unos 800 menores migrantes no acompañados pese a que la capacidad actual es de 645 plazas, por lo que se encuentran al 115% de su capacidad. «El Gobierno está reventando las costuras de un sistema en el que buscamos la atención y acompañamiento de los menores para conseguir su inclusión social hasta que cumplen 25 años».

Ya a preguntas de ABC, desde la Consejería de Inclusión Social se aseguró que la atención de estos 454 menores inmigrantes ha supuesto para las arcas públicas de Andalucía un coste que ronda los 3,5 millones de euros desde finales del año pasado.

López denunció el esfuerzo que se está haciendo desde la Junta para atender a estos chicos: «Nos estamos haciendo cargo a pulmón de estos menores para ofrecerles la atención que se merecen. Y lo estamos haciendo sin información, sin coordinación y sin financiación. Acudiré presencialmente a la Conferencia Sectorial con el compromiso de hacer un nuevo sobreesfuerzo, siempre y cuando haya financiación y tiempo para buscar más recursos», abundó.

Canarias sigue acaparando la llegada de inmigrantes a España, muchos enmascarados como adultos. Según los últimos datos del Ministerio del Interior, a España habían llegado desde el 1 de enero y hasta el pasado 30 de junio 24.898 inmigrantes, 12.194 más que en el mismo periodo del año pasado, lo que, en términos porcentuales, supone un aumento del 96%. Aunque Interior no desglosa los llegados a Andalucía, sí recoge los de Canarias: 19.257, un total de 12.044 más que en los primeros seis meses de 2023, lo que supone un aumento del 167%.

A la Península y Baleares –sin contar Ceuta y Melilla— han sido 4.453, 412 menos que en el primer semestre del año pasado, un 8,5% menos. La práctica totalidad llegaron a Andalucía, como constatan los datos a los que ha tenido acceso ABC. Así, la Cruz Roja ha atendido entre enero y junio a 2.865 migrantes llegados a la costa andaluza, la inmensa mayoría, unos 2.000, en la provincia de Almería. El año pasado, por estas fechas, fueron en torno a 4.000 los que arribaron al litoral andaluz