Nueva condena para el pediatra que abusó de seis menores cuando ejercía en un centro de salud de Almería

Inicialmente el Ministerio Público pedía 12 años de prisión, pero al estimar que concurren las atenuantes de reparación de daño por haber abonado 20.000 euros de responsabilidad civil y de confesión tardía se ha modificado la solicitud de condena. Las partes han comunicado su intención de no recurrir el fallo, por lo que el juez Luis Columna ha dictado sentencia y además de la pena de cárcel se impone libertad vigilada durante siete años y alejamiento a más de 500 metros de la víctima durante diez años.

Según los hechos narrados, el pediatra durante el verano de 2011 contactó con un niño de nueve años que vivía en su mismo edificio en Roquetas de Mar y «poco a poco fue ganándose su confianza». Después organizaba juegos en la piscina con otros dos menores que convivían con el y presentaba como sus hijos, también los llevaba al parque y a excursiones en bicicleta.

Guiado por un ánimo libidinoso, el condenado invitó al menor a que fuera a su casa para jugar a la videoconsola y una vez en el salón abusaba del chico a través de juegos de índole sexual en los que el pediatra aparecía desnudo . Así le decía al niño que eran juegos normales y que no era nada malo pero que no se lo contase a su madre ya que era un secreto entre ellos. La víctima padeció una sintomatología compatible con abusos sexuales con nerviosismo, bajo rendimiento académico, depresión y otro tipo de comportamientos anómalos.

En 2019, el condenado que contaba con 45 años a dmitió abusar de otros seis menores y pidió disculpas tanto a las víctimas como a sus familias . Aceptó en aquel momento cuatro años de prisión por cada uno de los delitos, otros dos de cárcel por un quito delito y otros ocho años y seis meses de cárcel por el sexto abuso cometido.

Durante cinco años, Carlos Alexander prestó servicios c omo pediatra contratado por el Servicio Andaluz de Salud en localidades almerienses de Huércal-Overa, Pulpí y Vera , desde marzo de 2008 hasta septiembre de 2013. Estableció relaciones de confianza con las madres de los niños que iban a consulta y se centraba sobre todo en las que tenían su misma nacionalidad.