La sal, el aliado secreto en tu hogar que limpia lo que no te imaginas
Quitar la grasa del estropajo, limpiar los huevos rotos en la encimera o la base de la plancha, son solo algunos ejemplos de lo que la sal puede hacer
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M.J. L.
Ya decía la mejicana Julieta Venegas que quería a su amado con limón y sal. Pues precisamente estos ingredientes son bastante amados por los que aman -valga la redundancia- la limpieza. Cada uno de ellos puede usarse en diferentes aplicaciones en el hogar, pero ... hoy lo que nos interesa es la sal, dejando al limón en un segundo plano, que tocaremos más adelante.
La sal puede llegar a muy útil en la vivienda, a pesar de que el sodio en exceso no sea tan beneficioso para la salud, pues podría ser uno de los factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares. Pero aquí lo que nos atañe sería contemplar todos los usos posibles en nuestros quehaceres diarios: desde eliminar grasa imposible, desatascar un desagüe o hasta incluso limpiar la base de la plancha.
Podemos empezar hablando de la sal como un desengrante eficaz en el hogar. El truco de la sal en las sartenes puede ser bastante útil para aquellas que tienen muchos restos pegados. Solo hay que verter un chorro de aceite en el fondo de la misma y extender, añadir un poco de sal y un poco de agua caliente. Luego esperaremos a que haga efecto, al menos 30 minutos. La mezcla hará que la grasa de disuelva con facilidad y será sencillo retirarla.
Por otro lado, la sal puede ser un disolvente para la grasa más incrustada del estropajo. Sí, como lo oyes, aunque parezca mentira, este elemento de la cocina suele estar lleno de grasa que se va depositando de un utensilio a otro, pues con la sal puede quedar como nuevo en segundos. La solución sería sumergirlo una noche en un recipiente con agua hirviendo y un cuarto de sal. Al día siguiente la grasa habrá desaparecido.
Una de las aplicaciones más comunes podría ser en el caso de la plancha. La sal puede ayudar a que desaparezcan los restos de cal. Así la ropa no tendrá manchas al plancharla que luego son difíciles de quitar. La solución es muy sencilla: ponemos una buena cantidad de sal sobre papel de cocina y deslizamos la plancha muy lentamente sobre la sal. Así los restos de cal desaparecerán.
También puede utilizarse para desatascar el desagüe. Mezcla bicarbonato de sodio con sal y viértelo por el mismo. A continuación, echa un chorro de vinagre blanco. Deja actuar media hora y posteriormente agua caliente. La solución será rápida y eficaz para ayudarte a que esos restos de suciedad se disuelvan fácilmente.
Otra de las utilidades más sorprendentes de la sal sería para limpiar huevos rotos. Para ello, debes cubrir con sal la zona afectada (huevos rotos sobre la encimera) y esperar una media hora. De este modo, la sal actuará como un potente disolvente.
Si tu bañera quieres limpiar, nada como la sal. Se acabó frotar esas manchas complicadas con agua, amoniaco y jabón, ahora deberías probar este truco. Mezcla sal y aguarrás. Ten cuidado y usa guantes para el aguarrás, pues es bastante tóxico. Vierte un poco de la mezcla sobre el estropajo y empieza a frotar las manchas y verás cómo salen eficazmente.
Y por último, si tienes un percance en casa y sale ardiendo una sartén, no recurras a intentar apagarla con agua, pues suele avivar el fuego. Lo que puedes hacer es verter sal en la misma para apagarla.
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