Susana Díaz tampoco logrará superar la votación del viernes

El PP entregó al PSOE un documento con sus medidas para mejorar Andalucía (un resumen de su programa electoral que Juanma Moreno considera que recoge las principales necesidades de la comunidad autónoma) y ambas fuerzas políticas mostraron públicamente su postura común de sentarse a negociar.

Otra cosa será de qué se hable, además, en esas reuniones que se intensificarán en los próximos días. Porque el PP quiere poner toda la carne en el asador a cambio de una hipotética abstención de sus diputados para permitir que Susana Díaz forme Gobierno. Y el primer asunto que interesa a los populares es el de dejar gobernar a la lista más votada. Un debate que, quizás, ahora no está en la agenda del PSOE pero que podría estarlo después de las elecciones municipales del 24 de mayo. No hay que olvidar que el margen para elegir a una nueva presidenta en Andalucía termina el 5 de julio, cuando se cumplen exactamente dos meses desde la primera votación de investidura. Entonces, el escenario político habrá cambiado para PSOE y PP porque estará en juego no sólo la Junta sino, además, numerosos ayuntamientos y diputaciones.