Tres «menas» graban un vídeo en el que torturan a un joven, que murió

La víctima, un hombre de 28 años y también argelino, fue hallado «atado de pies y manos» y con cerca de sesenta puñaladas . En las imágenes se observa el suelo completamente ensangrentado y dos hombres atados; «uno de pie», con la cara contra el suelo, «casi inconsciente», mientras que uno de los torturadores sujeta la cámara. Los arrestados hablaban en árabe entre ellos.

La detención se produjo, según avanzó ayer el diario «Levante», por una nimiedad: intentar colarse en el Metro de Valencia sin pagar el billete. Tras ser arrestados, los tres «menas», como se conoce a los menores inmigrantes no acompañados, fueron llevados a comisaría. Los agentes observaron que en su calzado había restos de sangre y que además presentaban en las manos cortes recientes , por lo que comenzó la investigación para saber a qué se debían esas lesiones. Además, se tomaron muestras y se consultó con la oficina europea de coordinación policial Sirene por si se hubiera producido algún suceso en el que los «menas» pudieran estar implicados, como efectivamente sucedió.

De acuerdo con las primeras pesquisas, tras el crimen en el piso de Lyon huyeron a España, en concreto a Valencia. Uno de los menores había estado internado en un centro de Murcia hasta el pasado mes de diciembre, pero escapó.

Al tratarse de menores no acompañados, se dio parte a la Fiscalía de Menores y gracias a la colaboración de las policías española y francesa se les identificó como autores de la agresión filmada y difundida en redes.

El delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Juan Carlos Fulgencio, explicó ayer que aún no se sabe el número de víctimas: «Sabemos que hay uno cierto, pero podrían ser más; lo único que sabemos es que se desplazan en estos momentos policías franceses para ejecutar esa orden de extradición internacional que ha pedido el Gobierno galo».

Al tratarse de menores, el representante del Ejecutivo rehusó ofrecer más detalles sobre este caso, dado que «es una investigación todavía en curso por las autoridades francesas» y hay que ser «muy exquisitos en no dar información que podría perturbar la identidad de los implicados».

El vídeo se difundió en redes sociales el día siguiente al crimen y la Policía francesa logró interceptarlo de inmediato . Además publicó un mensaje en las redes para pedir a los ciudadadanos que no transmitiesen las imágenes.

En ese vídeo «se podía ver e identificar, sin ningún género de dudas, a los tres menores agrediendo a otros dos jóvenes en un piso, a los cuales tenían atados y retenidos contra su voluntad, al tiempo que les intimidaban gravemente y les causaban lesiones, cortándose el vídeo sin saber cuál era el desenlace final».

La Fiscalía ha acordado el internamiento de los menores en tres centros distintos de la provincia de Valencia en régimen cerrado a la espera de que pasen a disposición judicial en la Audiencia Nacional. Se les acusa de homicidio y torturas.