«¿Cómo pudieron secuestrar a dos niños sin que llamara la atención de nadie?»

La Sala repasa algunos de esos indicios como son la anormal actuación de Bretón en el tiempo que estuvo con los niños en la parcela de Las Quemadillas, la "incomunicación total" durante ese periodo hasta para sus familiares, la hoguera que encendió, los caminos elegidos para salir de la parcela o las bolsas de basura que arrojó en varios contenedores , pese a haber estado quemando desperdicios, según figura en el auto adelantado por "El Programa de AR" (T5).

Parten los jueces de que los dos niños desaparecen cuando estaban bajo la responsabilidad de su padre y este justifica su pérdida "casual" en el parque con tres versiones distintas, sin que nadie pueda apoyar que los críos estuvieron en el parque Cruz Conde. "¿Cómo pudieron ser secuestrados dos niños, única explicación plausible a su versión de los hechos, en ese sitio y a esa hora sin que esa acción no llamase la atención no ya de su padre, sino de cualquier viandante de la zona?" , se pregunta la Sala.

Todos esos indicios son suficientes para mantener a Bretón entre rejas, pero además suma la prueba pericial que realizó la Universidad de Valencia, adelantada por ABC, en la que se concluyó que los niños no llegaron con su padre al entorno del parque . Es una pericia encargada por el juez instructor que "no ofrece motivos de parcialidad o subjetividad" , está razonada y motivada.

En la medida en que los menores siguen sin aparecer, subrayan los jueces, el encartado si quedara en libertad podría aprovechar su situación para "lograr marcharse a ese lugar con sus hijos, lo que bien pudiera constituir la finalidad perseguida con su conducta". Con estos motivos, la Audiencia cordobesa no tiene dudas, aunque recuerda al letrado de Bretón, José María Sánchez de Puerta, que en el momento que aporte la contra pericia solicitada podrá volver a presentar su recurso de libertad.

Mientras ya ha finalizado la reconstrucción ordenada por el juez en el lugar donde Bretón aseguró que aparcó su coche la tarde del 8 de octubre. Durante una hora y media, un policía ha ocupado el lugar de Bretón y dos niños los asientos traseros del Opel Zafira, propiedad del imputado. El objetivo era cronometrar con la máxima precisión los tiempos declarados por el imputado.