Iglesias metió a su fotógrafo en el avión y luego el Rey le echó un capote para que le dejaran pasar a los actos

Por ello, Don Felipe y Pablo Iglesias apenas mantuvieron contacto en las doce horas y media que duró el vuelo de ida -aparte de la escala que hicieron en la isla de Cayena para repostar- ni en las once horas y media del vuelo de regreso -cuando se repostó en el aeropuerto internacional Viru Viru, de Santa Cruz de la Sierra-. Solo hubo una excepción, poco antes de aterrizar en La Paz , cuando el Rey reunió a Iglesias y a la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, en torno a las dos mesas que hay en el avión (para ocho personas) con el fin de repasar los últimos detalles de la visita oficial.

También hubo otro acercamiento, en el vuelo de vuelta, cuando el Rey pasó ofreciendo al pasaje unos panecillos que le habían regalado .

El resto de los vuelos lo hicieron separados: Don Felipe, en el camarote, donde aprovechó para trabajar, descansar e intentar distraerse, y Pablo Iglesias, en la cabina junto a los demás miembros de la delegación. El vicepresidente aprovechó las largas horas de vuelo para leer «La distancia del presente», de Daniel Bernabé.

Aparte de los miembros del equipo de seguridad, el Rey viajó acompañado por el jefe de su Casa, Jaime Alfonsín ; el consejero diplomático, Alfonso Sanz Portolés ; el jefe de Protocolo, Alfredo Martínez , y el jefe de Comunicación, Jordi Gutiérrez , así como por el fotógrafo y el cámara de la Casa del Rey, que también se ocupó de distribuir imágenes de Iglesias. Igualmente, el médico de La Zarzuela veló por la salud de todos los miembros de la delegación, especialmente por prevenir que sufrieran mal de altura durante su estancia en La Paz, ya que no tuvieron tiempo para aclimatarse. Una cuestión que varios de ellos resolvieron tomando mate de coca, como recomiendan los lugareños.

A pesar de que la propia Casa del Rey distribuyó imágenes (fotografías y vídeos) de Pablo Iglesias, el vicepresidente del Gobierno quiso llevar a su propio fotógrafo, Dani Gago , que lo mismo ejerce de fotógrafo del vicepresidente que de fotógrafo de Podemos. Una vez en La Paz, cuando la delegación española se disponía a entrar en la Asamblea Legislativa para asistir a la toma de posesión de Arce, Gago se quedó algo rezagado y los agentes bolivianos trataron de impedirle que entrara, pero el Rey les dijo que iba con ellos y finalmente le dejaron pasar .

Además de su fotógrafo, Iglesias viajó acompañado por el responsable de gestionar su agenda y el coordinador de asuntos internacionales de su Vicepresidencia, Santiago Jiménez .

Según fuentes de la Vicepresidencia del Gobierno consultadas por ABC, la Casa del Rey indicó en un primer momento que Iglesias podría viajar a La Paz con seis asesores, pero después redujeron la cifra a tres como prevención sanitaria.