El Gobierno convoca un gabinete de crisis para seguir los acontecimientos

A la reunión asistirán entre otros la titular del ministerio de Defensa, Carme Chacón, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, así como representantes del CNI y altos mandos del Ejército.

Según las fuentes consultadas por Ep, los piratas están siguiendo los mismos procedimientos que emplearon durante el secuestro del barco alemán «Hansa Stavenger» , que estuvo retenido cuatro meses y que fue liberado tras el pago de dos millones de euros.

También en aquella ocasión, los piratas, que son del mismo grupo del que tiene secuestrado al «Alakrana» bajaron a tierra a algunos de los marinos retenidos con el fin de presionar al Gobierno alemán para que pagase el rescate exigido, que al principio era aproximadamente de unos 20 millones de euros.

La vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega se ha visto forzada a comparecer en una sala del Congreso -donde ha acudido a inaugurar un foro de parlamentarias españolas y africanas- para asegurar que el Ejecutivo español está haciendo «todo» lo que está en sus manos para lograr «lo más pronto posible» la puesta en libertad de los marineros del atunero «Alakrana». También ha pedido «tranquilidad» a las familias a la vista de los últimos acontecimientos.

De la Vega ha comparecido para dejar claro que el Gobierno continúa trabajando en esta compleja operación. No ha querido aportar más detalles sobre la situación actual por razones de «prudencia y responsabilidad» pero sí ha insistido en que el Gobierno «ha hecho, está haciendo y va a seguir haciendo todo lo que está en nuestras manos para que los tripulantes secuestrados vuelvan a casa cuanto antes». Por su parte, la ministra de Defensa, Carme Chacón, ha enviado un mensaje de tranquilidad a los familiares y les ha recordado que hay dos fragatas de la Armada española todavía avistando el buque. Al ser preguntada por si es cierta la versión que han dado las familias de los retenidos, ha dicho en declaraciones en Telecinco que no tenía esa información.

Está previsto que la fragata «Méndez Núñez» llegue hoy a la zona donde permanece secuestrado el «Alakrana» para dar relevo a la «Canarias». La ministra ha insistido en que, además de las fragatas, el avión de patrulla marítimas P3-Orión está vigilando el buque y ha dicho que, «en caso de necesidad», hay «otros elementos militares» de la «Operación Atalanta».

«No descartamos ninguna opción, pero no pondremos en peligro la vida de los tripulantes», ha asegurado.

Ha reiterado que el Gobierno está trabajando «de forma incansable y en todos los frentes posibles», tanto diplomático como de inteligencia y militar, para lograr la liberación del pesquero, «que tiene una prioridad, la vuelta a casa sanos y salvos de los tripulantes». Chacón ha desmentido a los familiares , al suscribir que el Ejecutivo «habla constantemente» con las familias a través del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, y le «consta» que «regularmente» los miembros de la tripulación del «Alakrana» hablan también con sus allegados.

«Les cuentan que están bien, que empiezan a estar muy tensos porque el secuestro está siendo largo», ha añadido, a pesar de que hoy los familiares corean que «tienen muchísimo miedo» y «están muy asustados», con malas condiciones porque ya les están privando de agua potable.

Preguntada por si la detención y el traslado a España de dos de los secuestradores ha dificultado la liberación, Chacón ha manifestado que los piratas conocen la existencia de la «Operación Atalanta» y «saben perfectamente» que «cuando se les encuentra cometiendo un delito de forma flagrante, se les detiene».

La ministra ha considerado que la comunidad internacional «se tiene que tomar mucho más en serio» la piratería en el Índico, «una industria del crimen», y ha explicado que, junto al «Alakrana» hay otros nueve barcos secuestrados, «uno detrás de otro, en ristra, de todas las nacionalidades». Ha avanzado que los buques podrán llevar a bordo agentes de seguridad privada «en cuestión de días» y que será Defensa quien se encargue de trasladar a la zona la seguridad y el armamento que contraten los armadores.