La Generalitat ajusta la ley para que los líderes del «procés» eludan pagar al erario

Entre los artículos retocados está el 56, al que se añaden dos epígrafes nuevos (bis y ter) que hacen referencia a las donaciones que los contribuyentes reciben de «fundaciones y asociaciones que cumplen finalidades de interés general, hayan sido o no declaradas de utilidad pública» y que supondrá, para el receptor de la donación, la posibilidad de «aplicar a la base imponible una reducción del 95 por ciento». Es decir, el impuesto de donaciones que gestiona la Generalitat se aplicará sobre el 5 por ciento declarado , siendo los tipos impositivos, según las tarifas de la Agencia Tributaria de Cataluña, de entre el 14 y el 64 por ciento en función de la base liquidable.

Los principales beneficiarios de esta modificación legislativa serán los implicados en las causas judiciales relacionadas con el procés y que acarrean fianzas económicas. A finales de 2018, Òmnium Cultural y la Assemblea Nacional Catalana pusieron en marcha una entidad con personalidad jurídica propia, la Associació de Foment de Caixa de la Solidaritat , cuya finalidad es la gestionar una caja de solidaridad que recauda dinero, mediante donaciones, para el pago de las fianzas a los protagonistas del procés .

Tras recaudar el dinero de las fianzas, esta entidad lo entrega a los encausados o lo paga por ellos. Una transacción que es imputable al contribuyente y que si se realiza mediante una donación lleva consigo la asunción de impuestos de entre el 14 y 64 por ciento (según la cuantía) del dinero recibido. Sin embargo, con la modificación legislativa aprobada en el Parlamento de Cataluña, los impuestos a pagar solo se tendrán en cuenta sobre el 5 por ciento del total recibido y como la cantidad a declarar será, obviamente, menor, el efecto será la aplicación de un porcentaje muy inferior de impuestos. ABC preguntó por esto a la Associació de Foment de Caixa de la Solidaritat, pero indicaron que no harán «ningún comentario al respecto».

Este ajuste legislativo, ad hoc para beneficiar a los independentistas según algunos expertos, supone el fomento desde la administración pública de la gestión de dinero opaco a un coste muy bajo. La donación a una asociación puede no declararse tributariamente, pero sí de una entidad a un particular, con un impuesto de hasta el 64 por ciento (al ser entre extraños); por lo que si se interpone una asociación para tributar sobre la base del 5 por ciento de la donación y el dinero es de origen ilícito, se está dando una salida barata al blanqueo de capitales .