La Fiscalía se opondrá a liberar a Junqueras para que no reincida

La decisión de la Sala Segunda, de lo Penal, del Tribunal Supremo condicionará las negociaciones para formar gobierno del Parlamento catalán , puesto que Junqueras es el candidato de ERC, la tercera fuerza en las elecciones y la segunda formación del independentismo, que tiene a su principal lider, Carles Puigdemont , fugado en Bruselas. Es la primera vez que la Sala de lo Penal del Supremo, la cumbre del sistema judicial penal, se pronuncia sobre el encarcelamiento de los líderes independentistas, imputados por empujar a la secesión por vías ilegales.

Junqueras, antiguo vicepresidente de la Generalitat, fue encarcelado por la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela , una decisión que mantuvo el sucesor en la investigación, el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena . El magistrado le atribuye los delitos de rebelión, o sedición, y malversación, y le otorga un rol esencial en el proceso independentista ilegal, que proclamó la independencia y desobedeció al Tribunal Constitucional (TC).

En la vista, que comenzará a las 10.30 horas y en la que estará presente Junqueras, la defensa del líder secesionista tratará de desvirtuar el riesgo de retieración delictiva, uno de los tres motivos que permite encarcelar a una persona que aún no ha sido juzgada ni condenada. En el recurso escrito que presentó a la Sala, el letrado Andreu van den Eynde alegó que la reincidencia es imposible en el actual escenario político en Cataluña. Los jueces, tras escuchar a las partes, podrían comunicar su decisión pasados unos días.

El cabeza de lista de ERC en los comicios catalanes considera que no es posible reincidir «durante los meses en que se pueda demorar la conformación de un Gobierno», el periodo exacto en el que nos encontramos. Junqueras, que negó cualquier delito en el plan secesionista ilegal, no expresó ninguna renuncia inequívoca a actuar fuera de la Constitución después, si volviese a ejercer funciones de poder. Los argumentos de Junqueras fueron insuficientes para convencer a Llarena, que dejó libres a otros imputados por rebelión al apreciar bloqueado el riesgo de reiteración . El magistrado tuvo en cuenta su compromiso a abandonar las actuaciones fuera de la ley.

La Fiscalía sostiene que hay que tener en cuenta –para apreciar reiteración– el carácter continuado del proceso independentista. Estas actuaciones «se han desarrollado en un prolongado espacio de tiempo, y han sido debida y minuciosamente planificadas y concertadas», expresó el Ministerio Público.

Los tres magistrados que escucharán los argumentos del abogado de Junqueras – Miguel Colmenero, Francisco Monterde y Alberto Jorge – conforman la Sala de Recursos de la causa por rebelión, encargada de revisar las decisiones del juez Llarena, siempre que los afectados planteen recursos de apelación. Se da la circunstancia de que los tres magistrados son compañeros de Llarena en la Sala Segunda . De dicha Sala se elige a los magistrados que estudian las apelaciones, y a los investigadores de los casos que corresponde instruir al Supremo, como la causa contra el proceso independentista ilegal. Fuentes jurídicas explican que, por ello, es infrecuente que se revoque una decisión de este calado, aunque depende del caso. Los magistrados encargados de las apelaciones se designan conforme a un turno de reparto previamente aprobado, con carácter anual, por la Sala de Gobierno del Tribunal Supremo.

El esquema de apelación es diferente al de otros tribunales, en los que el instructor suele dedicarse en exclusiva a labores de investigación. Un juez central de instrucción de la Audiencia Nacional , por ejemplo, no forma parte en abstracto de la Sala que tiene competencia para confirmar o revocar sus decisiones.

Más allá de la situación personal de Junqueras, la decisión que se adopte mañana en el Supremo va a tener un impacto político determinante. En buena forma, las opciones de ERC para aupar a su líder a la presidencia pasan obviamente porque éste pueda ser investido, más allá del tiempo que pudiese ejercer antes de que se celebre el juicio. La guerra entre el PDECat y ERC es subterránea, con sordina, pero dura en todo caso.

En superficie, retórica republicana y apelación a la restitución del «president legítim», un discurso que sostienen en ERC perfectamente sabedores de que la investidura de Puigdemont es imposible. No obstante, y como en la pasada legislatura, realidad y discurso discurren en planos divergentes.

Ayer mismo, el portavoz republicano, Sergi Sabrià , afirmaba que «a día de hoy» su partido «sólo trabaja con la opción» de que Puigdemont sea de nuevo presidente. En Rac1 señaló no obstante que «los que tienen que presentar la propuesta» es JpC, y decir «cómo se hace posible» el retorno de Puigdemont y su investidura. Mensaje directo a los estrategas del PDECat y la corte bruselense de Puigdemont.

En esta estela, y aunque sin responder a la pregunta clave que formuló ERC, fuentes de JpC afirmaron que mantienen contacto permanente con ERC y la CUP para «garantizar el resultado del 21D y revertir el 155 y sus consecuencias». Pura retórica. Mientras, una de las organizaciones integrantes de la CUP, Endavant, apretaba a Puigdemont preguntándole si de verdad quiere «materializar la república» o gestionar la autonomía».