Un «escudero» de Sarkozy contra ETA

Hortefeux no sólo trabajaba para Sarkozy cuando ambos corrían detrás de Jacques Chirac, eterno aspirante, por entonces (años 80 del siglo pasado), a presidente de la República. Hortefeux también fue el padrino del primer hijo de Sarkozy.

Conquistada la alcaldía de Neuilly (donde comenzó la carrera política de Sarkozy), Hortefeux se convirtió en confidente, ejecutor de las faenas más oscuras. Cuando el primer matrimonio de Sarkozy entró en crisis, Hortefeux ya conocía al propietario del piso donde el futuro presidente se daba cita con su futura segunda esposa.

Desde entonces, también ha oficiado de «sombra protectora» de Sarkozy, acompañándolo en todas las peripecias de la larga marcha que terminó en la presidencia de la República, pasando por los ministerios de Economía e Interior. Fue Hortefeux quien «orquestó» la campaña presidencial de Sarkozy.

Abogado de profesión, curtido en todas las guerras internas de las derechas francesas (Jacques Chirac contra Edouard Balladur, siendo Sarkozy amigo y enemigo de ambos, sucesivamente), Hortefeux es un conocedor excepcional de la geografía electoral francesa y el marketing político, que estudió con Sarkozy, también, durante un viaje personal a los EE.UU. a finales de los años 80 del siglo pasado.

El nuevo titular de Interior sólo tiene un «talón de Aquiles»: no tiene la implacable astucia verbal de Nicolas Sarkozy. Y, con frecuencia, su carrera política ha sufrido de una incontinencia verbal menos hábil de lo deseable, en ocasiones.